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Más ilusión que miedo a la vacuna

Los vacunados apenas sufren efectos secundarios tras la administración de las dosis

Personas reciben la vacuna en Massamagrell

Massamagrell era hasta el viernes uno de los puntos de vacunación masiva a las personas. Ahora está administrado segundas vacunas a personas de mayor edad que se vacunaron de la primera dosis en el rango de 80 a 90 años.

La administración de las dosis se está realizando en las instalaciones deportivas del One Wall, concretamente en el pabellón cubierto, lugar por el que pasarán todas las personas mayores de Massamagrell y de municipios cercanos como la Pobla de Farnals.

Levante-EMV ha querido testar la opinión y las sensaciones de vecinos y vecinas en el momento de recibir la ansiada vacuna contra la covid-19.

Testimonios de la vacunación en l'Horta

Josefa Lillo, de 87 años y vecina natural de la Pobla de Farnals, acudía al centro de vacunación para que le administrasen la segunda vacuna. «Con la primera vacuna lo único que sentí fue un poco de mareo, como si fuese borrachilla, pero fue durante unos pocos minutos. Después en mi casa ni me dolía el brazo ni sentí ningún tipo de malestar», explica. Tras recibir la segunda vacuna, quince minutos después del pinchado, Josefa afirmó estar «perfectamente».

Otros vecinos como Fernando Basante, de 70 años y vecino de Massamagrell, llegaba al pabellón a vacunarse de la primera dosis, declarando no sentir ningún tipo de miedo y «con mucha ilusión». Tras inyectarle la vacuna, afirmó «no haber sentido nada», y a la espera de la siguiente vacuna «con muchas ganas».

Amparo García, de 72 años, también vecina de la Pobla de Farnals, declaraba no sentir ningún miedo y sobre todo «esperanza» de poder volver a hacer la vida que conocía antes de la pandemia. A la vecina de la Pobla, le iban a administrar la primera vacuna y al salir, pasados 20 minutos del One Wall, aseguró que no había mostrado «ningún síntoma» como malestar, dolor en el brazo o décimas de fiebre.

Antonio Furió, de 71 años y vecino de Massamagrell, sentado en una silla a la entrada del pabellón del municipio, declaraba estar «muy tranquilo» y con «ganas de vacunarse» de la primera dosis «para poder abrazar a los nietos de nuevo». En eso coincidía también su mujer, Concha Salvador, de 70 años, quien había acudido a que le administrasen la primera vacuna, «sin ningún tipo de problema».

Transporte a pueblos vecinos

Por otra parte, el pabellón One Wall de Massamagrell cuenta con un dispositivo formado por cuatro agentes de protección civil que se encargan de velar por el correcto funcionamiento de entrada y salida, y también de vigilar que se cumpla las medidas sanitarias con la distancia de seguridad en la entrada al recinto. También, se dispone de otro agente de Protección Civil que se encarga de recoger y llevar de nuevo a su casa a los vecinos y vecinas de las localidades cercanas mediante una furgoneta del ayuntamiento al que pertenezcan.

Tras los diferentes testimonios tanto de las personas mayores como de las propias sanitarias, se está demostrando que la vacunación es segura y sobre todo que los riesgos son infinitamente menores por vacunarse que por el hecho de no hacerlo.

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