La Confederación Hidrográfica del Júcar ha iniciado diligencias de investigación, a través del Servicio de Policía de Aguas y Cauces, para determinar la procedencia del vertido que se ha producido en el Barranc del Palmaret de Moncada y que fue denunciado ante el juzgado por el grupo Compromís. Tras la consulta de este diario, fuentes de la CHJ han informado que están efectuando una inspección sobre el terreno, «con cuyos resultados se definirán las actuaciones subsiguientes que resulten pertinentes». La coalición valencianista denunció que, en los primeros días del mes de abril, por el margen del barranco a la altura del puente que conecta la C/Concejal Moreno Calleja, se comprobó que dos cañerías de desagües de gran tamaño no paraban de verter agua llena de suciedad, de pañuelos y toallas de uso sanitario, al lecho del barranco.
El Ayuntamiento de Moncada también ha confirmado que, a principios de la semana pasada, un representante de la CHJ se reunió con el técnico municipal para recoger información sobre este vertido. El consistorio, tras la denuncia de Compromás, también está estudiando la situación y ha podido extraer algunas conclusiones. Según el concejal de Urbanismo, Agustín Sales, este vertido podría proceder de dos aliviadores de recogidas de aguas pluviales, uno de ellas situada en prolongación de Fernando el Católico y el otro en la prolongación de la calle Mayor.
«Se construyeron estos aliviadores hace ya más de 15 años para evitar inundaciones. Cuando llueve mucho, puede rebosar el agua y llegar al Barranc del Palmaret, pero en todo caso sería agua limpia. Moncada no está haciendo ningún vertido que no sea legal», matiza el concejal.
Sin embargo, en la denuncia interpuesta por Compromís en el juzgado se muestran fotografías donde se ve claramente la presencia de toallitas higiénicas en ese vertido. «Cuando llueve mucho, a lo mejor ese agua rebosa de la balsa y cae a la tubería del aliviadero y puede ir mezclada con algún residuo», apunta el concejal. Además, Sales explica que en la red de alcantarillado están separadas las aguas residuales, que se dirigen a las antiguas balsas situadas en en el camino de Benifarag, que permiten que lleguen hasta la depuradora de Alboraia de forma controlada.
«Nunca se ha limpiado»
Por otra parte, el consistorio también ha aprovechado el interés de la CHJ por la situación de este vertido para pedir un mayor mantenimiento del Barranc del Palmaret. «La Confederación nunca ha limpiado este barranco, está sucio y esto hace que muchas veces se quede agua estancada con los problemas que eso acarrea», señala Agustín Sales.
El Barranc del Palmaret es una especie de afluente del Barranc de Carraixet, bastante reciente, y como todos los cauces la gestión y la titularidad es de la CHJ, aunque hay controversia a la hora de determinar la responsabilidad sobre la limpieza de los mismos, ya que son los consistorios los que deben mantenerlos en su transcurso por el casco urbano.
Compromís per Picassent denuncia que se han utilizado herbicidas en el barranco
La coalición Compromís per Picassent denunció en el turno de ruegos y preguntas del último pleno que se habían utilizado herbicidas para tratar algunas plantas del lecho del barranco. «Según las consultas realizadas a un técnico forestal, éste nos ha dicho que el uso de herbicidas no está autorizado en zonas acuáticas porque destruyen la flora y la fauna de la zona y además deberían estar señalizado su uso para avisar a los viandantes», señala la portavoz Trini Carballo.
Por su parte, la concejala del área, Lola Albert, respondió que se trataba «de una denuncia muy seria» y que la CHJ manda el protocolo de actuación «y se permite usar herbicidas con pincel. La CHJ pasa el protocolo al jefe de brigada y este lo sigue utilizando solo los productos permitidos por la CHJ, no hacemos nada que no esté permitido», matizó Albert.
