En un recorrido de apenas 2,5 kilómetros y con una duración de poco más de una hora, permite conocer los mejores atractivos de Godella, el municipio de l’Horta Nord, a tiro de piedra de València.

La estatua de Tenor Alonso, la Torre del Boïl, la iglesia de Sant Bertomeu, el Balcó de l’Horta y Castillo, la Casa-Museo Pinazo, la Travessia del Pi, los Horts Municipals, la Torre de control del Metro y la Plaza de la Ermita y sus chalés Modernistas son las nueve paradas que conforman la ruta para concer Godella que ha impulsado la concejalía de Turismo. Se trata del primer itinerraio guiado por el núcleo antiguo de la población, que se estrenará el próximo 25 de junio coincidiendo con la celebración de la novena edición del Festival de Música Gothejazz, que reúne a centenares de amantes de la música de todos los rincones de Valencia.

La ruta arranca en el kiosko, junto a la estación de metro. David Peris, diplomado en turismo y guía oficial de la C. Valenciana, es el responsable de liderar la ruta por los entresijos de Godella y sus primeros indicios tras la reconquista de Jaume I, donde en el Llibre de Repartiment se concede al noble Pere Maça el territorio entorno a la Alqueria de Godayla.

Así, durante el recorrido se puede conocer la iglesia de Sant Bertomeu, el primer templo cristiano del municipio que data del siglo XVIII; el teatro Capitolio, inaugurado en 1952; la Torre dels Boïl, edificada en el siglo XVIII y declarada BIC; el Balcó de l’Horta, desde se contempla toda la huerta valenciana; las cuevas donde vivía gente a principios del siglo XX y que fueron derruidas en la década de los 60; o la fama de los abanicos de Godella allá por el siglo XVI y su evolución en el tiempo, ya que en la década de los 50 el municipio albergaba hasta treinta talleres de pintura de palmitos.

Pero sin duda, los dos máximos atractivos de la ruta son conocer la Casa-Museo Pinazo y los chalés modernistas junto a la Ermita. Ignacio Pinazo Camarlech habitó en Godella desde los años ochenta y es uno de los personasjes de referencia de la localidad. En el interior del museo se exponen obras de Ignacio y de sus dos hijos: José (pintor) e Ignacio (escultor). Por otro lado, la subida a la Ermita se ha convertido en un catálogo de construcciones modernistas, tanto de influencia extranjera como local, nacidas en las primeras décadas del pasado siglo, por familias acaudalas de la capital que querían pasar el veraneo en Godella.

Desde los orígenes a hoy

Al final del recorrido, tras un paseo de algo más de una hora y 2,5 km a pie, el visitante o el vecino puede «conocer el valor de todo lo que compone Godella. El patrimonio, la tradición, la cultura… son señas de identidad de nuestro municipio y es momento de darle valor con las visitas que vamos a organizar». explica el concejal de Turismo, Adolf Rodríguez. Por su parte, David Peris apunta que «caminaremos por Godella para, a través de su valor patrimonial. Será una ruta en la que conoceremos todo lo que significa Godella, desde sus orígenes y hasta nuestros días».