“El mundo está lleno de Guillems, entre todos lograremos grandes avenidas para la libertad”. Tal como estaba previsto para la entrada del verano, el pueblo de Burjassot, de la mano de la Associació Cultural Bassot, homenajeó la memoria del joven ‘maulet’ y antifascista Guillem Agulló i Salvador con un concierto en el XXVIII aniversario de su asesinato a manos de la barbarie. El homenaje, con el lema “Guillem, nosaltres no t’oblidem”, se hizo extensivo a todas las víctimas de la sinrazón y la intolerancia.

  La Casa de Cultura de la Ciudad de los Silos –municipio oficialmente declarado en junio de 2013 “pueblo contra el fascismo, el racismo, la homofobia y la xenofobia”– albergó este pasado sábado por la tarde un encuentro que numerosas personas, colectivos vinculados a la lucha contra los delitos de odio, sindicatos, entidades como Escola Valenciana, la Universitat de València y Acció Cultural del País Valencià, entre otras, y el consistorio burjasotense hicieron posible para “mantener encendida la llama por un futuro mejor” y “decir no a aquellos espacios que hablan y actúan desde el odio y la violencia”.

  El Cor de l’Eliana –que abrió el recital–, el cantautor Pau Alabajos y grupo de folk El Diluvi –que bajó el telón– pusieron la música y los versos. Como cantó el “cronista de meravelles”, Vicent Andrés Estellés, “no podran res davant d’un poble unit, alegre i combatiu”. El auditorio se tiñó de esperanza.