La población de Picassent celebró en la explanda de la Ermita, un acto homenaje al voluntariado que, durante el estricto confinamiento, iniciado en marzo de 2020, brindó su colaboración de manera altruista para trabajar por el bienestar de los vecinos y vecinas del municipio.

Durante el homenaje se hizo un reconocimiento a la tarea de los servicios esenciales, a las empresas y el tejido comercial del municipio que demostraron su valor humano, y a los colectivos y asociaciones que consiguieron que los efectos de la ayuda «crecieran de manera exponencial».

«Este acto es un deber que teníamos como pueblo. Era necesario dar las gracias a las personas que en una crisis sanitaria han dejado de lado el miedo, se han remangado y se han puesto a trabajar por Picassent dando lo mejor de sus capacidades para ayudar a sus conciudadanos», afirma el concejal de Participación Ciudadana, Salvador Morató.

Flores por los fallecidos

Asimismo, el consistorio, representado por su alcaldesa, Conxa Garcia, ha depositado un centro floral con 61 rosas a la Virgen de Vallivana, en recuerdo de los vecinos y vecinas de la localidad fallecidos por coronavirus.