Ya lo avisó en la comisión informativa previa al pleno y cuando tomó la palabra para intervenir no defraudó. Rosario Marco, con la autorización para hablar del portavoz naranja y exalcalde Guillermo José, anunció que se iba abstener y atacó al alcalde popular Agustín Aliaga, convirtiéndose públicamente por momentos en un partido de la oposición y no en un socio del tripartito. 

La sesión extraordinaria de Rocafort debatía este viernes, las nuevas competencias del ejecutivo y las retribuciones. El punto discordante, como sucedió en la comisión informativa que adelantó en exclusiva este diario, era la delegación del área de Comunicación (que ha llevado Marco desde el inicio del mandato), que ahora pasa a manos de Susana Martínez (PP), destituida hace meses por el exalcalde José.

Marco aseguró que no tenía problema alguno con que Martínez asumiera Comunicación, también se encargará de Hacienda, Igualdad y Mantenimiento de edificios municipales, pero admitió que «estamos molestos» porque su socio popular «no está cumpliendo el pacto». Y lo explicó. Días antes de la comisión informativa, PP, Cs y Vox sellaron un documento con las nuevas delegaciones, «pero no distribuidas por partidos sino que eran nominativas para cada concejal», afirmando que Comunicación no era para Martínez, sino que el alcalde (estaba asignada a alcaldía) se la delegó con posterioridad. «Eso no lo puede decidir el alcalde, sino el pacto», aseguró.  Por tanto, al considerar que «no se está cumpliendo el pacto», Marco anunció que Cs se abstendría. 

A partir de ahí, al revelar que el PP estaba advertido de que Susana Martínez podría ser destituida y que sigue habiendo rencillas entre PP y Cs -«estas no se liman de un día para otro»-, el alcalde advirtió a Marco que se ciñera al orden del día y ambos entraron en una discusión más propia de gobierno y oposición. «Estos son los tiempos que nos esperan, donde el alcalde, si no dices lo que quiere oír, coarta la libertad de expresión», espetó la edila de Cs.

Aliaga volvió a rogar a Marco que fuera concluyendo su intervención: «Nosotros también tenemos cosas que decir del pacto y no lo decimos porque no procede, y vaya acabando, por favor». Marco replicó: «Vista la libertad de expresión, igual que en la comisión, no usaré el turno de réplica. Aquí se aplica el mando yo y hablaréis cuando yo quiera (en alusión al alcalde). Muchas gracias, alcalde», dijo cerrando su intervención.

Marco pasó de 3 a 8 concejalías

El portavoz del PP, Gorka Gómez, admitió sentirse «abochornado de esta situación. Esto se debe debatir en privado, no en un pleno, porque a los ciudadanos igual no le interesa esto». Gómez le recordó a la concejala de Ciudadanos que cuando acordaron repartirse las competencias en junio de 2019, (Cs ostentaría la alcaldía dos años), a «usted le tocaron tres concejalías, y en el documento que se llevó al pleno de julio, usted ya tenía ocho concejalías, entre ellas Comunicación, que depende del alcalde (como entonces) y que ahora ha decidido delegar en Susana Martínez, y no vemos mayor problema». 

Finalmente el punto salió aprobado con los votos de PP, Vox y PSOE, Cs se abstuvo y Podemos votó en contra.