El Ayuntamiento de la Pobla de Farnals ha conseguido acondicionar los bajos de los antiguos salones Roquenublo, centro de múltiples quejas vecinales por la falta de salubridad, ante la pasividad de la empresa propietaria. Esta actuación se produce tras seis años de reclamaciones a la empresa en los que se les ha impuesto 10 multas coercitivas, que no se han pagado.
El coste de las actuaciones realizadas por el consistorio en esta instalación abandonado( 3.000 euros) ha sido remitido a la empresa propietaria, aunque el propio alcalde, Enric Palanca, afirma que no espera que sea abonada tras no ser sufragadas las multas anteriores.
El mandatario socialista recuerda que se topó con este problema pocos meses después de haber tomado posesión del cargo en diciembre de 2015, aunque el expediente de ejecución como tal es de agosto del 2017.
Con esto, Palanca aprovecha en su cuenta social de Facebook para denunciar los largos trámites burocráticos. «Los trámites administrativos no entiende de molestias a los vecinos ni de urgencias, es una verdad independiente de quien gobierne, señala el primer edil, quien también se queja de la falta de responsabilidad de los propietarios del inmueble. « No para amenazar con multas a los propietarios, estos reaccionan. De hecho cuando más grande el propietario más irresponsabilidad demuestra», afirma.
En el mismo sentido asegura que la actuación municipal en estos locales es una excepción, ya que «entrar desde el ayuntamiento a las propiedades privadas a prestar servicios que deberían asumir los propietarios es insostenible.