Sin poder usar el ascensor ni poder dejar el coche en el garaje. Así llevan una semana los 29 familias de una finca situada en la calle Mariano Benlliure 11 de Massalfassar, después de que las intensas lluvias del pasado martes por la noche provocaran la inundación del garaje y por tanto la del foso de los dos ascensores, que impide su puesta en funcionamiento.

Lo que parecía una inundación puntual se ha vuelto permanente. Cuando los vecinos comprobaron el miércoles, al día siguiente de las lluvias, que pese a haber dejado de llover, había un palmo de agua en el garaje, llamaron a Aguas de Valencia, ante el temor de que se hubiera roto una tubería. La empresa inspeccionó la instalación y no detectó ninguna fuga, pero sí determinó que se trataba de una filtración de agua debido a la subida del nivel freático ocasionado por las lluvias. Un mal endémico de la ubicación de Massalfassar, entre la huerta y el mar.

Ante la falta de soluciones la comunidad decidió instalar por su cuenta dos bombas que continuamente están achicando agua. El problema está en que la falta de uniformidad del suelo hace que el agua se concentre en ciertas zonas que no son detectables por la bomba, y hay que ir llevando ese agua a los puntos donde están colocados los extractores. Una situación que los vecinos afirman que una semana después ya se está volviendo inaguantable.

El hueco del ascensor permanece inundado en la finca de Massalfassar. L-EMV

“El problema es que no deja de salir agua pese a las bombas. Tenemos que aparcar el coche fuera y no podemos usar el ascensor, pese a que hay gente mayor y también familias con carros que tienen que subir por las escaleras. A muchos también les ha entrado agua en los trasteros, afectando a los enseres que tenían guardados ahí”, explica uno de los afectados, que asegura que la comunidad de vecinos se siente impotente.

No solo es por no poder usar el garaje. Es que cuando consigamos que ya no salga más agua, entonces tendremos que afrontar los daños materiales causados por las humedades. Ya están apareciendo grietas en algunas paredes”

“No solo es por no poder usar el garaje. Es que cuando consigamos que ya no salga más agua, entonces tendremos que afrontar los daños materiales causados por las humedades. Ya están apareciendo grietas en algunas paredes”, comenta un vecino, que asegura que en otras fincas de la zona también están teniendo el mismo problema, y que también temen las consecuencias económicas que puede causar esta inundación. “Habrá que ver lo que cubre el seguro, que siempre es una incógnita”, lamenta.

Yuste: “No podemos hacer nada”

Este garaje no es el único afectado. Según explican desde el Ayuntamiento de Massalfassar son muchos los bajos inundados y se han visto afectadas instalaciones municipales como el lavadero y el bar del polideportivo, cuyos bajos son utilizados como centro cívico que permite la reunión de colectivos como la escuela de música. El consistorio afirma que no pueden hacer nada ante la subida del nivel freático. “Es lo que tiene vivir a nivel del mar. Es verdad que no ha pasado antes, pero es no solo es por la lluvia del pasado martes, llevamos un mes que ha llovido muchísimo y si ha subido un metro el nivel freático no lo podemos controlar”, explica el alcalde, Higinio Yuste.

El lavadero municipal inundado. A.M.

El primer edil, de Ciudadanos, afirma que el martes, los que se encontraba ensayando en el sótano del bar del polideportivo “tuvieron que sacar el agua con cubos”. Una bomba está allí sacando constantemente el agua "pero cayó un rayó que dañó el sistema eléctrico y paró la bomba", lamenta Yuste, quien añade que por este motivo está el ascensor inoperativo. También el agua inundó el lavadero municipal, BRL, que en la zona baja donde hay dos acequias donde se lavaba antes, “llegó a tener 3 metros de agua”. “Por suerte esa zona aún no estaba reformada y como ya habíamos pedido una subvención para reparaciones de patrimonio, ahora también pediremos algún tipo de impermeabilización”, concluye.