La nueva normalidad, que ha significado el regreso de las fiestas populares a los municipios, también ha devuelto a las calles de l’Horta uno de sus elementos emblemáticos: el cohete. ‘Passejades’, ‘coetades’ y la tradicional ‘cordà’ se han vuelto a organizar en 2022, impulsadas por asociaciones, clavarías y ayuntamientos.

La manifestación de fuego con cohetes más reconocida es la Cordà de Paterna, que se mantuvo en 2021, para la que la ciudad lleva semanas de preparativos. En la madrugada del 28 al 29 de agosto estallarán en la calle Mayor unos 70.000 cohetes, como colofón de toda una semana de tiradas en el Cohetódromo, incluídas las celebraciones de aniversarios de la Penya el Morenet (el quinto) y la Quasipenya (el vigésimo quinto), las infantiles y otras. 

Cordà de Paterna. MIGUEL ANGEL MONTESINOS

La emoción es grande este año ya que la capital de l’Horta Nord vive sus primeras fiestas tras la declaración de Bien de Interés Cultural para este espectáclo, como aprobó el Consell en enero. Por ello, el ayuntamiento invierte este año en cohetes y otros elementos pirotécnicos más 350.000 euros, contanto la ‘cordà’ especial que se celebró en Fallas en la plaza del Ayuntamiento de València y los festejos del 9 d’Octubre. Del total, 209.000 euros se destinan solo a las fiestas mayores y a esta cifra hay que sumar lo que invierten las peñas en las tiradas.

De forma paralela, las actividades de cohetes se han recuperado en una decena de poblaciones, a través de distintas manifestaciones que, en total, invertirán más de 250.000 euros solo en la compra de los artefactos pirotécnicos, además de seguros de responsabilidad civil y otras medidas preceptivas. Y también han acusado la subida de precios.

Así, unos días después de Paterna, celebrará su ‘cordà’ y otras actividades con cohetes Alaquàs. Tras dos años sin actividades, que provocaron quejas ciudadanas en 2021, Amics i Amigues de la Cordà tendrá una ayuda municipal de 18.000 euros, el doble de lo habitual, además de las aportaciones propias y lo que invierten grupos festeros. Este colectivo tiene la función de organizar los actos cuando no hay clavarios y de asesorarlos y reforzarlos, cuando los hay. La ‘cordà’ por excelencia de la población es la del Crist, que llega en la madrugada del 8 al 9 de septiembre.

Este año tendrá 24 puestos con dos cajones por cada uno (los dos primeros para personalidades invitadas y el resto para participantes convencionales, que serán asignados en un sorteo, lo que es novedad) para unas 60 personas. Aunque por tradición son los clavarios los que organizan y financian la ‘cordà’ del Crist, el grupo de este año decidió optar por otras actividades y la responsabilidad ha recaído en Amigues i Amics. Para esa noche se ha reforzado el plan de seguridad con un nuevo vallado y arderán 2.500 docenas de cohetes, es decir, 30.000 unidades.

En los días previos se celebran la ‘cordà’ infantil con la ‘passejà’ previa; la pujà de Sant Miquel y la cordà dedicada a este arcángel (unas 1.200 docenas), por los clavarios, y la ‘pujà’ del’Olivar, por la cofradía, con una ‘pujadeta’ de niños y niñas al inicio, mientras que en la jornada posterior a la gran ‘cordà’ se realiza la ‘baixà’ del Crist.

También Picassent recupera su ‘cordà’, que no pudo celebrar en los dos anteriores mientras que Xirivella, que dedica dos días a las actividades de cohetes. En ambos casos, son asociaciones culturales las promotoras.

Un amplio calendario

El camino de cohete lo abrió este año Quart de Poblet, que volvió a celebrar la Passejà de Sant Onofre en el mes de junio, tras dos años de actividades alternativas. Según los datos aportados por Amics de la Passejà, este año se utilizaron 600 docenas de cohetes, unas 7.500 unidades. Y para la ‘pujà infantil’, se adquirieron 250 docenas de cohetes de una salida.

En Manises, donde se recuperó la ‘cordà’ en 2016, perdida en 2001, en julio participaron 30 personas que hicieron arder 1.250 docenas de cohetes (15.000 unidades). En una jornada previa, la ciudad vivió la «Peça», una manfestación más tradicional en la que 900 cohetes fueron cayendo desde un carrito. Coeters de Manises invirtió 8.000 euros de sus fondos gracias al remanente que tenía de dos años.

En Albal, un total de 15 personas que forman «Coeters d’Albal» dieron vida a la ‘cordà’ (la tercera de esta etapa de la tradición) en la que se utilizaron 700 docenas (8.400 cohetes). Solo el coste pirotécnico suma 5.000 euros, al que hay que sumar todos los seguros, gastos sanitarios y otros. El grupo indica que no dispone de ayudas económicas del ayuntamiento. «Nos gustaría tener el apoyo de otros pueblos porque es una actividad para el municipio», explican en la asociación.

Baixà 2022 de Aldaia.

Una de las poblaciones de mayor afición al cohete es Aldaia. La asociación Corretraca es la encargada de organizar y coordinar los festejos, que tienen como celebración central la Baixà del Crist. Tras el paréntesis de la pandemia, este año fue apoteósica con 200 participantes entre la entidad y la clavaría del Crist, además de particulares. La respuesta del público también fue «espectacular», valora la entidad. El grupo calcula que esa noche se utilizaron 1.600 docenas (19.600 cohetes), que supusieron un coste de 28.800 euros (la mayor parte la afronta Corretraca y el resto la clavaría), sumados a otros 17.000 euros de la ‘cordà’ (1.300 docenas y 15.600 cohetes), que tuvo 33 participantes; la ‘cordà’ infantil, a la que dieron vida 15 niños y niñas) y la ‘traca correguda’ de cerca de dos kilómetros. En total, 45.800 euros.

En Picanya, la peña el Coet, una de las veteranas de la zona, hizo estallar este año 2.000 docenas de cohetes en el recinto vallado, lo que corresponde a 24.000 unidades. Asimismo, en las actividades previas como la «Passà del Quadret» se quemaron 350 docenas (4.200 unidades). En total, se han destinado a la compra de este artefacto pirotécnico 17.000 euros. «Aunque era el 30 anivesario de la asociación, lo hemos celebrado con discreción tras los dos años difíciles que hemos pasado», explican.

Pujà de Sant Roc de Burjassot.

Y finalmente, en Burjassot, la ciudad con más tradición de cohetes junto a Paterna en l’Horta Nord, el colectivo el Coet ha destinado 30.000 euros de fondos propios a las distintas actividades. En 2021 también las realizó aunque en el mes de octubre, fuera de su calendario habitual. Este año, en la gran ‘coetà’, que cerró esta semana los actos, se consumieron 3.500 docenas (42.000 cohetes), a los que hay que sumar otra cifra casi igual en conjunto en la tradicional, la ‘pujà’ y la ‘baixà’ de Sant Roc. El grupo, fundador de la federación y una referencia en el sector, dispone de su propio vallado de seguridad, que puede acotar 400 metros cuadrados y que se presta a otros pueblos. 

Por su parte, en Mislata no habrá este año 'cordà' en las fiestas, según informan fuentes municipales. Tampoco Torrent ha incorporado aún esta tradición ya que la celebra en febrero, vinculada a "l'Entrà de la Flor" y en 2022 por las restricciones no se llevaron a cabo.