L'Horta Sud

Otras maneras de vivir en el área metropolitana de València: ' La ciudad me agobiaba y aquí tengo calidad de vida'

El Camping La Pirámide de Torrent cumple cuatro décadas de actividad y aunque en verano su censo aumenta considerablemente, hay aproximadamente 40 familias que residen en el terreno todo el año

Violeta Peraita

Violeta Peraita

El 19 de enero de 1983, hace exactamente 40 años, una pareja que era propietaria de unos terrenos en la ladera de la Serra Perenxisa de Torrent decidió habilitar una zona para caravanas y camping. Lo llamaron Camping La Pirámide. Aquello fue creciendo y lo atractivo de la zona natural imantó, como si de una fuerza física se tratara, a cientos de familias que compraron o alquilaron parcelas en el espacio de más de 100.000 metros cuadrados. 

Una vista aérea del Camping la Pirámide

Una vista aérea del Camping la Pirámide / C.P.

El Camping La Pirámide es algo parecido a un pueblo. Pero en vez de calles tienen caminos y avenidas (la A, la B, la C, en función de su recorrido).En vez de Iglesia tienen La Casona, donde se reúnen para ver partidos de fútbol o jugar a juegos de mesa y cuenta con un polideportivo (pistas de fútbol, baloncesto, tenis y piscina) que se llena de niños y niñas sobre todo en verano y los fines de semana. Tiene bar, centro social, supermercado, consultorio médico en verano y vigilancia. Es una urbanización, un pueblo, una comunidad. 

Más de 400 casas

El terreno alberga 420 casas y funciona como una sociedad civil particular. Los propietarios son socios y para organizarse tienen una junta directiva. Concha Dasí y Manuel Soto forman parte de ella, como si fuera un «equipo de gobierno» de un ayuntamiento. 

Miguel en la puerta de su casa, en el camping

Miguel en la puerta de su casa, en el camping / M.A.Montesinos

«Aquí somos todos propietarios o estamos en régimen de alquiler», explican. Algunas personas vienen los fines de semana, otras solo en temporada estival y también hay quienes han decidido establecer su residencia permanente allí, en el Camping la Pirámide. «Los fines de semana durante el año llegamos a ser unas 2.000 personas y en verano, 5.000», explican los vecinos. Ahora mismo, estiman, hay 40 familias que residen en el camping durante todo el año.

"Los fines de semana durante el año llegamos a ser unas 2.000 personas y en verano, 5.000"

Amparo y Miguel son una de ellas. Son de Paiporta pero llevan treinta años viniendo al camping en vacaciones y ahora que se han jubilado y con los años, han ampliado el remolque a una casa y se han mudado allí. «Conocimos el camping por un compañero de trabajo de mi marido», apunta Amparo. Compraron una parcela hace tres décadas que ahora es su casa y los fines de semana, vienen sus hijos con los nietos.

Amparo y Miguel frente a su casa en el camping La Pirámide

Amparo y Miguel frente a su casa en el camping La Pirámide / M.A.Montesinos

«Ha cambiado mucho en estos treinta años, se ha hecho más grande, se ha mejorado los servicios. Es tranquilo y nos conocemos todos, como en un pueblo en miniatura», señala el matrimonio.Tienen plantas en el recibidor de su casa, a la que han añadido un porche cerrado con cristalera que en pleno invierno mantiene una temperatura cálida. 

Teletrabajo en Perenxisa

Por la vía donde está su casa aparece José. Este joven informático de 31 años dejó su piso en la ciudad de València y se mudó de manera permanente al camping hace dos años. Su abuela llevaba 20 años yendo en vacaciones y cuando sus padres se compraron una parcela, al poco tiempo él y su hermano gemelo se animaron.

José, un joven que se ha comprado una parcela para vivir en el camping

José, un joven que se ha comprado una parcela para vivir en el camping / M.A.Montesinos

Ahora, tras la covid, su empresa instauró el teletrabajo, lo que le permite vivir en el camping al no tener que ir a la oficina todos los días. «Estoy muy a gusto, aquí tenemos mucha tranquilidad, naturaleza y aire puro», explica José. De vivir cuatro en un piso han pasado a vivir cada uno en su «casita» del camping. «Vivir en la ciudad me agobiaba, mucho ruido, mucha gente. Aquí hay tranquilidad y eso, para mi, es calidad de vida», señala el informático. 

"Vivir en la ciudad me agobiaba. Aquí, en cambio, hay tranquilidad y eso para mi es calidad de vida"

Ahora ,el supermercado está cerrado por obras pero José asegura que ir a la compra no es problema. «Me organizo y voy un día a la semana a por todo lo que necesito», relata. Para llegar al Camping la Pirámide, hay que atravesar un camino rural. Una vez llegas a la entrada, no hay duda. Es una ciudad en miniatura. 

Una parcela son 100 metros cuadrados y lo que acaba siendo la vivienda son 50.Casi todos son propietarios, pero también hay quien alquila parcelas por meses o años. La cuota mensual oscila entre los 400 y los 500 euros según los miembros de la junta directiva y rentar el terreno un año puede costar entre 2.500 y 3.000 euros, un precio muy por debajo de lo que se encuentra en un piso en Torrent o en otros municipios de l’Horta.