La piscina de la Pobla de Farnals reabrirá sus puertas en abril tras tres años cerradas

El pleno aprobó la adjudicación a una empresa para los próximos 5 años después de que el anterior contrato acabase en el juzgado

La piscina de La Pobla de Farnals abrirá sus puertas en abril.

La piscina de La Pobla de Farnals abrirá sus puertas en abril. / A.P.

Pilar Olaya

Pilar Olaya

La piscina de La Pobla de Farnals volverá a abrir sus puertas el próximo mes de abril después de estar cerrada desde marzo de 2020. El último pleno aprobó el contrato de gestión y explotación de la piscina municipal a la empresa valenciana Recolim, por cinco años.

El alcalde Enric Palanca ha anunciado que el proceso de licitación de la gestión de la piscina municipal avanza en paralelo con la realización de obras de acondicionamiento y modernización de las infraestructuras que se inició el verano pasado. A su vez, también se ha abierto el proceso de licitación del bar de la piscina que en unas semanas se anunciará para que se presentan las empresas concursantes".

La piscina municipal cerró las puertas en 2020 al entrar en concurso de acreedores la empresa que lo explotaba, que tenía contrato hasta 2024. Un fin del contrato que acabó en los juzgados, ya que la anterior contrata reclamaba 300.00 euros al consistorio. El juzgado, sin embargo, falló a favor del gobierno local quien se puso a trabajar en una nueva licitación, ya que es la segunda vez que la piscina cerraba desde que se inauguró en 1996. Para ello, el consistorio encargó un estudio de viabilidad, que refleje la valoración económica, el balance de ingresos y gastos que pueda suponer la explotación de la piscina.

También el consistorio tuvo que hacer frente a importantes obras de reparación de las instalaciones, por un importe de 337.843 euros, sufragados por recursos municipales y de la Diputación debido a la falta de mantenimiento sobre todo de los últimos años.

Al final, tras descartarse una explotación municipal, "puesto que el ayuntamiento no tenía una plantilla suficiente ni actualmente podría tenerla", se ha optado por una solución mixta en la que el nuevo contrato dejará el mantenimiento en manos municipales, "para que en caso de repetirse la historia, la piscina nunca vuelva a caer en un estado ruinoso como el que estaba", concluye Palanca.