Cruz Roja diseña un plan de recuperación por la DANA para los próximos tres años

La recuperación de las zonas afectadas por los efectos de la DANA en la Comunitat Valenciana va a llevar mucho tiempo. Tanto es así que Cruz Roja está trabajando en un Plan de Despliegue de Recuperación que contempla actuaciones de cara a los próximos tres años, según han informado fuentes de la entidad a este diario. Si bien en estos momentos se está ultimando el contenido de este proyecto al que todavía no se le ha puesto un nombre oficial, sí que se sabe que entrarán varias áreas del conocimiento de Cruz Roja, entre ellas Inclusión Social, Medio Ambiente y Conocimiento de Educación.

Militares, policías y maquinaria pesada sitian Paiporta

Desde que el pasado 29 de octubre el desbordamiento de ríos y barrancos devastara 70 municipios de la provincia de Valencia, Cruz Roja ha trabajado de manera ininterrumpida 24 horas los siete días de la semana. Cada día más de 800 voluntarios trabajan a pie de calle para atender a los damnificados y un total de 3.867 personas del ente han sido activadas desde el principio de la emergencia.

Más de 200.000 asistencias

Todos ellos han prestado más de 200.000 asistencias desde el primer día y han realizado más de 105.000 manutenciones a través de los 27 puntos de distribución que se han habilitado en los puntos afectados. Además, han realizado más de 600 atenciones psicosociales y han distribuido 855 tratamientos médicos a pacientes crónicos, gente mayor y personas con movilidad reducida gracias al convenio que tienen con el Colegio de Farmacéuticos.

Desde Cruz Roja no recuerdan una emergencia sanitaria de esta magnitud relacionada con un episodio de gota fría y ya lo equiparan con catástrofes como la el terremoto de Lorca, la pantanada del 82 o más recientemente la alerta sanitaria por el Covid. El problema, indican, es que esta es una intervención "muy compleja" porque la zona afectada "es muy extensa" y los daños se extienden a hogares y comercios, pero también a centro de servicios básicos como ambulatorios, colegios o ayuntamientos. La prioridad, insisten desde la organización, "es intentar restablecer la normalidad lo antes posible y estamos trabajando en ello". El siguiente paso será cubrir las necesidades que los voluntarios están detectando a pie de calle para actuar con el plan de recuperación.

Equipos multidisciplinares

Cristóbal Cáceres es uno de los voluntarios que estos días está actuando en Paiporta. Llegó el viernes desde Almería cogiendo el testigo a otros compañeros que llegaron los primeros días desde la ciudad andaluza. Entre otras labores, el joven está prestando atención psicosocial con los Equipos de Respuesta Inmediata de Emergencia (ERIE), unas brigadas multidisciplinares compuestas por psicólogos, trabajadores sociales, personal sanitario y socorristas de acompañamiento para tramitar las primeras necesidades de las personas que se han visto afectadas por la tragedia, no solo los propios vecinos sino también el personal interviniente, como policías, ambulancias o los miles de voluntarios que están ayudando, y que están sufriendo las secuelas psicológicas al vivir la situación tan de cerca.

"Lo que hacemos es ubicarnos en diferentes sitios y ponernos a disposición de los equipos para que nos activen y nos manden tareas, desde distribuir de agua, alimentos y medicamentos a domicilio, realizar atenciones sanitarias básicas por un tubo, como curas o poner colirios, ayudar en los trabajos de desescombro o atender a la población". Respecto a esto último, "detectamos las necesidades más urgentes de la población y en función de eso las canalizamos y las segregamos en equipos", explica Cáceres. Estas atenciones, cuenta se están prestando en diferentes escenarios: "En las carpas que se están instalando en los camiones que despliegan asistencia sanitaria, en puntos de distribución gestionados por Cruz Roja, en los domicilios de los afectados e incluso a pie de calle", aunque esto último se intenta evitar para facilitar un espacio reservado y que las personas puedan ser atendidas con mayor privacidad.

Cuidar la salud mental

"Hay que analizar la problemática de cada persona para prestar una atención personalizada porque dependiendo de las necesidades de cada persona se puede ejecutar esta atención de una manera u otra", indica al tiempo que destaca la importancia en la atención a la salud mental en estos momentos: "Con todo lo que ha ocurrido está pasando a un segundo plano, pero es muy importante abordarlo y tratarlo para evitar que se cronifique el trauma y el shock de cara al futuro y para aprender a convivir con todo lo que han vivido".

En este sentido, voluntarios como él han realizado más de 600 atenciones "en las que intentamos reconducir la situación y dar pautas". Este servicio se está prestando a pie de calle, pero también a través de la línea telefónica Cruz Roja Te Escucha (900 107 917) "donde también se presta este tipo de atención y se dan pautas".

Cinco sedes destrozadas

Desde Cruz Roja remarcan la labor de los voluntarios y el importante papel que están jugando en la recuperación de los municipios afectados. Además, recuerdan que muchos voluntarios que están colaborando con la entidad y que ahora son intervinientes fueron damnificados.

A este respecto indican que entre el personal "muchos de ellos sobrevivieron agarrados en columpios y árboles" e informan que cinco sedes de Cruz Roja se han visto afectadas "y están completamente destrozadas". Así con todo, insisten, "estamos intentando restablecer la normalidad lo antes posible y entre todos lo vamos a conseguir".