Protesta de vecinas de Benetússer: "Godzilla veranea en mi garaje"

Un grupo de vecinas de la calle Maestra Juana Sena y de la calle l`Horta de Benetússer se han concentrado ante el ayuntamiento de esta población valenciana para reclamar ayuda desesperada a la alcaldesa Eva Sanz y que les facilite medios materiales y humanos para limpiar los garajes privados de esta zona del pueblo así como unas cuantas viviendas de planta baja. Nuria Rodríguez, que portaba un cartel en el que se podìa leer: "Godzilla veranea en mi garaje", relató a Levante-EMV que estos propietarios se sienten abandonados por el consistorio, máxime tras pasar por el inmueble una perito municipal que les comunicó que en el garaje no se puede entrar. "Ha pasado un mes de la dana y seguimos igual. En la primera planta del garaje ya se puede acceder aunque está lleno de barro. Pero en la segunda planta hay 40 coches atrapados en un lozadal, en el fango", dice. La única solución que les queda es recurrir a una empresa privada. "La primera planta la ha limpiado una empresa que hemos contratado a razón de 300 euros por plaza. Yo he perdido el coche y mi marido, la moto. No podemos más. Por la mañana me inflo a sacar fango y por la tarde me voy a trabajar con buena cara, porque soy personal esencial, estoy cara al público y trabajo en alimentación", explica.

Las dos realidades de Benetússer

"Para ir a trabajar, sin vehículo te tienes que buscar la vida, y mientras, la técnico del ayuntamiento vino y nos dijo que a la segunda planta no se puede acceder. En cambio, "si pagas y contratas a una empresa privada sí pueden entrar", lamenta. "Hemos presentado infinidad de escritos por registro de entrada pero no nos hacen caso", reclama. Cuando accedan al lugar y acaben de limpiar, "habrá champiñones radioactivos", critica con cierto humor.

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"Lo he perdido todo, solo me quedan las paredes"

El testimonio de Carmen Montes es desgarrador. Tiene 71 años, vive en la calle LHorta y está harta y desesperada. "Lo he perdido todo y necesito que me ayuden ya". En su calle había tres viviendas de planta baja y un garaje, en el subsuelo. Se han inundado totalmente y ha pasado un mes y solo hay humedad, barro y agua. "He perdido todo: los armarios, los muebles, la nevera... No tengo nada ni un triste trapo de cocina. Solo me quedan 4 paredes. Mi marido que es un poco más mayor que yo, tiene dificultades de movilidad, y al principio, estuvo sentado en una silla de plástico porque una vecina me la dio", relata en medio de la indignación.

"He perdido todo, puertas, camas... las camas estaban cubiertas de dos palmos de barro", señala. Ahora vive con su hija en Torrent pero está cansada de promesas y de ir a recoger comida. "¿Dónde están las ayudas? necesito rehacer mi casa, porque yo quiero vivir en mi casa. Pero hay que cambiarlo todo. Necesito albañiles, fontaneros, electricistas". Y hasta que no saquen el barro y el agua no se puede hacer nada. "El coche lo he perdido, lleva días bajo el agua y el barro. Necesitamos soluciones, ya estoy harta de comer macarrones que me salen por la garganta. Para conseguir tramitar las ayudas he tenido que ir a tres sitios y hacer 10 kilómetros", reivindica. Además, se muestra muy dolida porque a su calle no llegan los barrenderos del pueblo ni siquiera el coche del bando. "Los barrenderos limpian media calle y se giran por la calle de al lado. Pero no limpian mi trozo. El coche del bando del ayuntamiento hace lo mismo. Yo quiero saber qué dicen. En cuanto a las ayudas no dan ni el adelanto ni el dinero", finaliza.