Nueva fuente de agua filtrada y refrigerada en el centro de Burjassot

El Ayuntamiento de Burjassot, a través de la concejalía de Servicios Municipales que dirige Manuel Pérez Menero y de Global Omnium-Aguas de Valencia, ha instalado una nueva fuente en el centro de la localidad, concretamente en la Plaza de Emilio Castelar, junto a la estatua del poeta Vicent Andrés Estellés.

Se trata de una fuente de agua gratuita, filtrada y refrigerada que ya está a disposición de la ciudadanía y que viene a reforzar objetivos municipales tan importantes como el fomento de hábitos saludables y sostenibles o la reducción de residuos plásticos. De hecho, esta nueva generación de fuentes, modelo PUDSAR, permiten rellenar las botellas particulares de los usuarios y usuarias, promoviendo así un consumo responsable y una disminución de las botellas de plástico para consumo particular y diario. Por otra parte, el agua que vierte la nueva fuente, además de estar filtrada, está sometida a un proceso de climatización, de manera que su temperatura será la óptima, dependiendo de la época del año, estando a temperatura ambiente en los meses más fríos, y bien fresca, en los calurosos meses de verano.

El alcalde de Burjassot, Rafa García y el concejal de Servicios Municipales junto a otros miembros de la corporación municipal y a responsables de Global Omnium, han estado en la puesta en funcionamiento de la nueva fuente. El primer edil ha destacado que “fomentar el consumo de agua del grifo y promover que la ciudadanía rellene gratuitamente sus botellas de uso personal son prácticas que revierten en la preservación y la sostenibilidad de nuestro entorno. Cada paso cuenta y esta nueva fuente, ya a disposición de la ciudadanía, es un ejemplo más de nuestro compromiso con la salud y el bienestar de los ciudadanos, pero también con el cuidado del medio ambiente”.

Estructura de acero inoxidable

La instalación consta de una estructura de acero inoxidable con cierre de seguridad antivandálico de 1,5 metros de altura, aproximadamente, y que permite depositar la botella a una altura cómoda para el usuario para poder rellenarla y que, además, queda fuera del alcance de los perros. Basta con ubicar la botella en la posición marcada para que se dispense el agua tratada y refrigerada automáticamente, sin necesidad de tener que pulsar ningún botón. Así, y mediante un temporizador de suministro, se rellena la botella de manera automática. La regulación de la temperatura se realiza en función de las necesidades según la época del año.