La tensión se vivía aún este sábado por la mañana en la rotonda que da entrada el polígono industrial Pla de Quart de Aldaia, donde decenas de jóvenes inmigrantes deambulaban con sus enseres entre las naves industriales, las rotondas y un par de coches de la Guardia Civil. Unas 37 personas habían sido desalojadas desde el viernes por la tarde tras horas de angustia general, gritos, golpes y sangre, de la antigua fábrica de Cofedeva, escenario de un batalla digna de una película durante largas horas entre los propietarios del solar y sus ocupantes.
