Chiva ha logrado sacar adelante el contrato de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria para los próximos diez años. La empresa adjudicataria es Tetma, la misma mercantil que ya obtuvo la concesión para el periodo entre 2008 y 2018 y que tras caducar, se prolongó mes a mes durante cuatro años, suponiendo un agravio para las arcas públicas de 2,1 millones de euros que la Agencia Antifraude afeó hace solo unas semanas.

Se resuelve así un proceso administrativo que se ha dilatado durante casi 10 meses debido al retraso en su redacción, que debía haber comenzado antes de que finalizara el convenio anterior, pero que inició su andadura a principios de este año. Una vez redactado, tuvo que ser sometido a varias modificaciones debido a las quejas de las empresas que optaban a la adjudicación del concurso por un servicio valorado en 18,1 millones de euros, el más elevado de la legislatura.

Según explican en el consistorio, el nuevo contrato entrará en vigor una vez acabe el periodo de alegaciones al que tienen derecho las empresas que han concursado. Destacan que se incorporan mejoras como el incremento de los días de recogida en urbanizaciones y diseminados, que pasan de dos a cuatro días a la semana. También se renueva la flota de camiones, se renuevan todos los contenedores y los puntos de recogida aumentarán en función de las necesidades detectadas. Otro de los puntos relevantes es que se incluye en el contrato la limpieza de vertederos, lo que supondrá la eliminación de un coste extra para el consistorio como es en la actualidad, al igual que aumentará el servicio de limpieza y se reforzará la barredora.

Además, la empresa pondrá sus medios humanos de atención telefónica a los vecinos para, entre otros, el servicio de recogida de enseres y trastos. También se recupera la figura del controlador del contrato, para el buen cumplimento del mismo y que el Ayuntamiento tenga más herramientas de supervisión. De hecho, en las conclusiones publicadas por la Agencia Antifraude tras una denuncia anónima, este organismo de la Generalitat avisaba "que no se ha designado inspector del servicio ni responsable municipal encargado de la inspección, control y fiscalización de la prestación del servicio [...] a pesar de los regulado en el Pliego de Prescripciones Técnicas (PPT) y en el Pliego de Cláusulas Administrativas (PCAP)".

Recogida separada de residuos

Según se ha especificado en el contrato y así se ha resuelto ofrecer, el contrato contempla la adaptación a la nueva legislación europea, que obliga a incorporar sistemas de recogida separada de la basura orgánica. Esto en la práctica supone la inclusión del conocido como quinto contenedor o contenedor marrón, el de los residuos orgánicos.

División en el pleno

Como era de esperar y tras la polémica generada en los últimos años, el pleno votó dividido. El bloque del gobierno votó a favor (Compromís y Más, IU, Vinchi y Cs) mientras que el PP se abstuvo y el concejal no adscrito votó en contra. Los ediles de ADUC no asistieron al pleno.

El edil de administración general, Fernando Casanova, explicó la complejidad del proceso y los informes técnicos que han decidido cuál era la mejor oferta. Además, destacó la mejora en los servicios, al igual que el alcalde, Emilio Morales, quien justificó el incremento de inversión por la cantidad de mejoras en conjunto para toda la ciudadanía.