Doce meses: Hablamos con la enfermera Elisa Ramos Pareja :: Prensa Ibérica

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Hablamos con la enfermera Elisa Ramos Pareja

Dr. Miguel Delgado Lacosta

Enfermera supervisora de Críticos y Urgencias en el Hospital Quirónsalud Málaga.

¿Qué le motivó para ser enfermera de UCI?

Me apasiona el trato con las personas. Poder ayudarlas en su recuperación y cuidados, sobre todo, de pacientes críticos.

¿En qué consiste exactamente el trabajo del enfermero en las UCIS? ¿Cómo era el día a día antes de la pandemia?

La labor del enfermero en UCI es un trabajo complejo que , entre otras cosas, requiere mucha organización y perfeccionismo . En nuestro día a día cuidamos a pacientes críticos que necesitan nuestra máxima atención y cuidados para su mejora.
Nuestra H-uci ya tenía una actividad alta de ingresos procedentes de intervenciones complejas (intervenciones cardiacas, carcinomatosis), así como pacientes procedentes de Urgencias.

¿Y cómo se fue transformando vuestro trabajo desde la llegada de los primeros contagios? ¿Qué cambios sufrió el hospital, su unidad y su desempeño?

Una de las cosas que más resaltaría de nuestro equipo de H-uci es la capacidad que tienen para adaptarse al cambio y enfrentar las situaciones de estrés junto con su siempre, trabajo en equipo. Las primeras noticias se recibían con incertidumbre y algo de miedo pero siempre trabajando desde la seguridad de que hacíamos todo lo indicado.
Reorganizamos el servicio, creando una “Uci limpia” en la sala del recuperación y por otro lado, una Uci respiratoria, en la que se atendían a los pacientes covid. Se dotó a la unidad con más respiradores, materiales, personal, etc., además de nuevas pautas de actuación adecuadas a la nueva situación.

El coronavirus ha cambiado su desempeño laboral, pero ¿cómo le ha afectado en el plano personal?

Dice un dicho popular que “lo que no te mata, te hace más fuerte”.
Ha sido un año difícil para todos. Los sanitarios, al estar en primera fila, nos hemos llevado imágenes más duras de toda esta película real y eso obviamente ha tenido y tiene sus consecuencias.
Con el apoyo de los compañeros, a los que, la mayoría de las veces veíamos más que a nuestra familia, ha sido menos difícil lidiar esta batalla, la que sin duda, nos ha unido más aún y nos ha hecho más fuertes.

En concreto, ¿qué sacrificios ha tenido que hacer usted o qué ha sido lo más difícil a lo qué ha tenido que enfrentarse en el último año?

Además del cansancio físico y emocional que ha supuesto enfrentarnos a esta pandemia, creo que una de las cosas que peor hemos llevado es no poder compartir tiempo con nuestros seres queridos.

¿Cómo consiguen mantener la fortaleza física y psicológica?

Tengo la suerte de contar con un equipo de compañeros que me demuestran su fortaleza física y psicológica cada día. Que entregan esa fortaleza a sus pacientes en cada uno de sus gestos y actos, independientemente de cómo tengan el turno de trabajo. He visto a estos compañeros intentar sacarle una sonrisa a un paciente, después de haberse secado las lágrimas por haber perdido a otro. La fortaleza es algo que se trabaja día a día pero creo que ellos, la tienen innata.

¿Qué enseñanzas y lecciones saca de todo esto?

Sin duda hemos aprendido a aprovechar más el tiempo, los momentos, las pequeñas cosas. Lo reconfortante que puede llegar a ser un abrazo o ver a alguien al que quieres. He aprendido lo importante que es el trabajo en equipo y que con esto pocos retos se resisten. He aprendido muchas cosas, en definitiva, a valorar más la vida y a darme cuenta de que estoy rodeada de los mejores profesionales y compañeros que puedo tener (aunque esto ya lo sabía)

¿Qué mensaje y recomendaciones daría a toda la población en este momento?

Pediría por favor que se rijan a las recomendaciones que hacen los expertos, que actúen con sensatez y seguridad para evitar que volvamos a esas situaciones tan críticas por las que hemos pasado todos.