Dr. Raymond Miralbell: ‘Actualmente el 60% de nuestros pacientes son pediátricos’ :: Prensa Ibérica

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Dr. Raymond Miralbell: “Actualmente el 60% de nuestros pacientes son pediátricos”

Dr. Raymond Miralbell

El Doctor Raymond Miralbell es el director médico del Centro de Protonterapia del Grupo Quirónsalud. Miralbell explica las ventajas que ofrece este tratamiento innovador en el tratamiento del cáncer y hace balance del primer aniversario del centro, que supuso la introducción de la protonterapia en España

Hace un año, Quironsalud trató al primer paciente en España con terapia de protones. ¿Qué supone esta tecnología para el tratamiento del cáncer?

La terapia con protones ha supuesto un avance muy importante en el tratamiento de ciertos tumores muy difíciles de curar por otros medios o con radioterapia clásica, ya sea por las elevadas dosis de irradiación necesarias (por ejemplo, tumores de la base de cráneo, tumores del sistema nervioso central), o para poder reducir la dosis en órganos sanos cercanos al tumor (por ejemplo, tumores infantiles). La radioterapia con protones representa, pues, una alternativa avanzada, segura y efectiva en la lucha contra algunos tipos de cáncer dado que permite ‘esculpir’ la dosis de radiación alrededor del tumor, reduciendo el riesgo de dañar los tejidos sanos circundantes.

¿En qué consiste exactamente?

La protonterapia es un tipo de radioterapia que usa haces de protones para irradiar el tejido afectado por un tumor. Los haces de protones se producen a partir de átomos de hidrógeno, a los que se extrae el único electrón del que disponen y, mediante un ciclotrón, se aceleran y son dirigidos hacia el tumor para su tratamiento.

¿Cuál es la principal diferencia con respecto a las técnicas de radioterapia convencional?

Con los protones conseguimos un haz que permanece enfocado al tumor y el tejido circundante recibe una dosis mínima de radiación. En el caso de la radioterapia convencional –fotones o electrones– esto es imposible y afectan a todo el tejido irradiado. En cambio, cuando utilizamos haces de protones, gracias a una característica física conocida como pico de Bragg, la energía se concentra en un punto en concreto sin dosis de salida ya que la mayor parte de la energía se deposita donde está el tumor.

Además, esta terapia tiene múltiples indicaciones.

Actualmente hay ya numerosas indicaciones, siendo especialmente útil en los tumores situados en la base de cráneo, difíciles de extirpar y resistentes a las dosis administrables con radioterapia convencional. También en el caso de los tumores pediátricos es prioritario reducir a toda costa los efectos secundarios inducidos por las radiaciones en los órganos en crecimiento, evitando alteraciones del desarrollo integral y la inducción de cánceres radioinducidos en la vida adulta. Otra indicación son los tumores intraoculares.

Además, un sinfín de indicaciones están siendo investigadas hoy en día como, por ejemplo, la posibilidad de proteger el corazón en pacientes con cáncer en la mama izquierda en las que la radioterapia sea necesaria. Básicamente, podríamos decir que todo paciente, en el que sea necesario un incremento de dosis de radiación al tumor o una reducción de la dosis a los órganos críticos circundantes es potencialmente candidato a un tratamiento con protones.

¿Cómo funciona el Centro de Protonterapia?

Recibimos solicitudes de médicos especialistas, nacionales y extranjeros, y de los propios pacientes. Todos los casos son evaluados inicialmente con la documentación clínica pertinente en una reunión multidisciplinar.

Aquellos pacientes que se consideran candidatos a protonterapia acuden a una primera visita médica para la puesta en marcha del tratamiento, durante la cual se explican las características del tratamiento, su desarrollo, así como los posibles efectos secundarios que puedan aparecer durante el mismo o a largo plazo. Una vez el paciente da su consentimiento a la propuesta terapéutica se realizan los exámenes necesarios para la planificación: CT, RM, PET-CT, u otros. El proceso de planificación para definir los volúmenes diana de tratamiento y los órganos y estructuras a proteger, así como el cálculo del plan de tratamiento, es un trabajo en equipo entre los radio-oncólogos y los radio-físicos.

Todos nuestros pacientes son controlados durante todas las sesiones de tratamiento para evaluar la necesidad de adaptar los planes de tratamiento en caso de cambios anatómicos.

¿Cuál es el balance del primer año de actividad?

Las patologías tratadas hasta el momento incluyen tumores del sistema nervioso central, sarcomas, tumores primarios de la base del cráneo o tumores del área ORL que la infiltran. Después de iniciar el tratamiento del primer paciente pediátrico en febrero de este año, podemos decir que actualmente el 60% de nuestros pacientes son pediátricos, y más de la mitad de ellos son menores de 5 años.

¿Cómo ha afectado la pandemia a este centro?

Hemos conseguido mantener la actividad de forma ininterrumpida gracias a unos rigurosos protocolos de seguridad y control para reducir al mínimo el riesgo de contagio en nuestras instalaciones. En ese sentido, ha jugado un papel crucial el hecho de que seamos un centro monográfico de alta especialización, al que no acuden pacientes por otras patologías como podría ser el covid-19. Estamos certificados como ‘Hospital Seguro Covid-19’.