Efe / Ap, Islamabad / Nueva Delhi

El ministro de Comunicaciones y Servicios Públicos, Tariq Farooq, afirmó ayer que decenas de pueblos en la región han sido borrados del mapa y que ninguno de sus habitantes parece estar vivo.

Mientras la ciudad de Muzaffarabad, capital de la parte paquistaní de Cachemira, está totalmente devastada, el segundo lugar más afectado parece ser Bagh, situado a unos 40 kilómetros al sur.

La agencia humanitaria Oxfam afirmó ayer que la parte paquistaní de Cachemira fue la más destruida por el terremoto y que precisa de ayuda inmediata para los desplazados, ya que las temperaturas han empezado a bajar.

En un comunicado, Raphael Sindaye, coordinador de respuesta ante la gestión de desastres de Oxfam en Islamabad, dijo que han iniciado «una evaluación en tres de las cinco áreas donde ya tiene equipos desplegados» y que la gente «precisará urgentemente de mantas».

Cinco distritos de la parte paquistaní de Cachemira fueron devastados por el terremoto de 7,6 grados, que provocó diversos deslizamientos de tierra, que han cortado las comunicaciones con muchas de las zonas y dificultan las tareas de rescate.

El director general de las Fuerzas Armadas paquistaníes, general Shaukat Sultan, afirmó que hay diversos lugares donde los equipos de rescate no han podido llegar y que, una vez que se llegue allí, la cifra de fallecidos podría aumentar.

600 muertos en India

En India, la cifra de muertos por el terremoto ha aumentado hasta 600, con más de 5.700 viviendas dañadas. Los habitantes de la región siguen protestando por la falta de ayuda. Para esta zonas se estima que se necesitan unas 40.000 mantas y tiendas de campaña.

El ejército indio se ha desplegado en la zona y procede al reparto de alimentos de primera necesidad, medicinas y agua potable. A pesar de todo, la población se ha manifestado por falta de ayuda gubernamental y militar. Unos 200 residentes de la zona bloquearon la carretera entre Baramulla y Uri durante 45 minutos mientras acusaban al Gobierno de ignorarles.

El ministro de Economía cachemir Muzaffar Hussain Baig negó estas acusaciones y explicó que el Gobierno hace todo lo que puede. «El terremoto ha causado muchos daños en las infraestructuras y la red de comunicaciones. El tiempo no acompaña lo que bloquea la ayuda al menos temporalmente», explico. Según el ministro, «puede haber sitios donde se hayan producido retrasos pero los funcionarios y agentes también son personas».

La mayoría de los habitantes de la provincia de Jammu-Kashmir han pasado la noche al aire libre, encendiendo fuegos con maderas debido a las bajas temperaturas.

Además las autoridades han confirmado que entre los muertos se encuentran 54 soldados del ejército y las fuerzas paramilitares que se encontraban en la línea de control que separa la parte india de la pakistaní.

La ONU reclama 200.000 tiendas

La Oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios (OCHA), que ya coordina con las autoridades de Pakistán, India y Afganistán las labores de asistencia, pidió ayer con urgencia a la comunidad internacional 200.000 tiendas de campaña de invierno en las que albergar a las víctimas paquistaníes.

«Hay más de 2,5 millones de personas que necesitan abrigo con urgencia. Necesitamos 200.000 tiendas de campaña de invierno en las que darles albergue inmediato», dijo ayer la portavoz de OCHA en Ginebra, Elizabeth Byrs.

«También nos hace falta dinero para adquirir ese tipo de tiendas a nivel local», informó la portavoz, que dijo que el personal del Alto Comisariado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), que ya atiende a 800.000 personas en esa región, «ha puesto a disposición de los afectados material que tenían en Peshawar».

Por su parte, un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) dijo ayer que la mayor parte de las provincias paquistaníes devastadas están siendo también afectadas por fuertes lluvias, lo que dificulta más el acceso a un área montañosa en la que las principales rutas y carreteras están destruidas.

Agregó que un primer envío desde Kabul a Islamabad llegará en las próximas horas a la capital paquistaní y que consiste en 10.000 mantas y 3.000 tiendas de campaña impermeabilizadas, que asistirán a unas 3.000 familias.