El secretario de Estado vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone calificó ayer de "secuestro" y de "hecho inaudito y grave" la retención de obispos belgas con motivo de la investigación abierta a la Iglesia católica de Bélgica por la supuesta ocultación de casos de pederastia. Bertone hizo estas declaraciones ante la prensa al margen del VII Simposium Internacional de Docentes Universitarios que se celebra en la Universidad Lumsa de Roma.

El secretario vaticano subrayó además que "no existen precedentes (de casos similares), ni siquiera en los antiguos regímenes comunistas" y criticó que los obispos estuvieron retenidos durante nueve horas "sin comer ni beber". El pasado jueves agentes de policía y funcionarios judiciales efectuaron registros en la sede del arzobispado de Malinas-Bruselas y la vivienda personal de un cardenal en busca de documentos que corroboraran una denuncia de abuso sexual a menores por parte de miembros de la Iglesia católica.

El registro en la sede del arzobispado, la mayor circunscripción administrativa de la Iglesia católica belga, se realizó de forma simultánea a una reunión de la Conferencia Episcopal nacional, a la que asistía el nuncio apostólico.

De hecho, los servicios administrativos del arzobispado belga seguían ayer temporalmente paralizados como consecuencia de la operación policial.