El presidente ruso, Vladimir Putin, ha firmado este martes el acuerdo para la anexión de Crimea y Sebastopol a Rusia con el primer ministro de la península, Sergei Aksionov, el presidente del Parlamento crimeo, Volodimir Konstantinov, y el alcalde de la ciudad autónoma, Alexei Chaly.

Putin ha estampado su firma en el acuerdo con los tres dirigentes crimeos al término de su discurso en una sesión conjunta de la Duma y el Senado celebrada este martes en la sede de la Cámara Baja, tras el referéndum del domingo en el que el 96,77 por ciento de los votantes crimeos apoyaron la incorporación a Rusia.

En su intervención ante los parlamentarios rusos y los dirigentes de la península de Crimea, el mandatario ruso ha puesto de relieve las contradicciones de Occidente en relación con Ucrania y ha dejado claro que Crimea "ha sido" y "será siempre" parte de Rusia.

El acuerdo rubricado por Putin tiene que ser ratificado por el Parlamento para su entrada en vigor, algo que se espera que ocurra este mismo martes.

Valores comunes

Putin se apoyó en los resultados del referéndum, así como en la historia de Crimea, para argumentar su intervención, y se refirió a los valores comunes que comparte la península con Rusia.

"En Crimea están las tumbas de los soldados rusos, y la ciudad de Sebastopol es la patria de la Flota del mar Negro", señaló, en medio de estruendosos aplausos de los diputados, muchos de ellos con la cinta patriótica de San Jorge prendida en sus solapas.

También incidió en la posición del Kremlin, que considera ilegítimo al actual poder en Ucrania, y añadió que muchos órganos estatales ucranianos están en manos de radicales.

"No ayudar habría sido una traición"

El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró hoy en el Kremlin que Rusia no podía dejar sin respuesta la petición de la autonomía ucraniana de Crimea para su reunificación con Rusia porque "habría sido una traición".

"No pudimos dejar sin respuesta la petición de Crimea y de su pueblo. No ayudar a Crimea hubiera sido una traición", dijo Putin ante el pleno del Parlamento ruso.

Negó, como ya hiciera en otras declaraciones desde el inicio de la crisis ucraniana, que las tropas rusas hayan ocupado la península de Crimea, como han denunciado Ucrania y la comunidad internacional.

"Las tropas rusas siempre han estado allí. Se fortaleció esa agrupación" (de la Flota rusa del Mar Negro, emplazada en Sebastopol), pero ni siquiera hemos superado el límite de nuestras Fuerzas Armadas en Crimea", acordada con Ucrania en los 25.000 efectivos, subrayó Putin.

El jefe del Kremlin recordó que aunque el Senado ruso autorizó el envío de tropas a Ucrania en caso de una escalada de la violencia en el país vecino, él no ejerció ese derecho.

"Nos hablan de la intervención rusa en Crimea, de una agresión. Se hace raro escucharlo. No recuerdo en la historia ni un solo caso en el que una intervención se haya realizado sin un solo disparo y sin víctimas", subrayó.