La autoridades alemanas cancelaron hoy una carrera ciclista internacional prevista para este viernes en Fráncfort, por sospechar que era el objetivo elegido por los dos presuntos radicales islámicos -una pareja germano-turca-, detenidos la noche anterior y en cuyo domicilio se hallaron armas y una bomba de tubo.

El departamento policial del Investigaciones de lo Criminal del Land de Hesse -al que pertenece Fráncfort- adoptó esta decisión, por considerar que la celebración de la prueba, de 206 kilómetros de recorrido y un clásico en el calendario ciclista, entrañaba un peligro para la población.

Según informó hoy en rueda de prensa el fiscal de Fráncfort, Albrecht Schreiber, las sospechas de que el objetivo podía ser este evento deportivo cobraron fuerza ya que uno de los detenidos -el hombre- había sido observado por el equipo de investigación mientras merodeaba en una zona boscosa por la que iba a discurrir la carrera.

Se trataba de la 54 edición del clásico Finanzplatz Eschborn-Frankfurt, que recorre la región del Taunus y concluye en la ciudad de Fráncfort y que está incluida en el calendario de la Unión Ciclista Internacional (UCI).

La cancelación se produjo después de la detención de la pareja y registro de su domicilio, donde se encontraron armas, munición, una bomba de tubo capacitada para funcionar y diversos productos líquidos que pueden ser empleados para preparar artefactos explosivos similares a los empleados en otros atentados.

En una comparecencia ante los medios, Stefan Müller, jefe de la Policía de Hesse, no quiso aventurar el potencial destructivo de la bomba, pero aludió a los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, en los que murieron 192 personas.

Según explicó Müller, la policía comenzó a hacer un seguimiento del sospechoso tras recibir los primeros indicios de un empleado de un almacén especializado en artículos de bricolaje.

Ahí compró el hombre, a finales de marzo, peróxido concentrado y al serle requerida su identificación -como es preceptivo ante ciertas cantidades de esos material- dio un nombre falso.

Este producto, mezclado con otros líquidos, tienen un "gran potencial explosivo", indicó la fuente policial.

Se investigaron entonces los antecedentes del hombre, de 35 años y de nacionalidad turco-alemana, y se comprobó que tenía vínculos con los círculos radicales islamistas en la región renana.

Al sospechoso se le relaciona con el llamado grupo de Sauerland, una célula integrada por varios alemanes conversos que fueron detenidos en septiembre de 2007 con más de 700 kilogramos de material explosivo cuando preparaban varios atentados.

Las autoridades tenían bajo observación a la pareja -el hombre y su mujer, turca, de 34 años- y apostaron por "pasar a la acción" al ver al hombre merodear en el recorrido de la carrera ciclista.

"Por lo que hasta ahora sabemos, hemos impedido un atentado", aseveró Müller a la luz de lo encontrado en el registro, que se realizó a las 04.00 de la madrugada, hora local (02.00 GMT).

Entre el material incautado, la policía enumeró tres litros de peróxido de hidrógeno (agua oxigenada), acetona y otras sustancias potencialmente explosivas, una bomba de tubo, cien unidades de munición del calibre 9 milímetros y componentes de un fusil de asalto G3.

Junto a la pareja se encontraban en la casa dos niños de corta edad, que pasaron a la custodia de los servicios sociales.

La Policía ha solicitado la colaboración de la Oficina de Investigación de lo Criminal (BKA) para determinar si los detenidos formaban parte de una célula terrorista o actuaban en solitario.

El ministro alemán del Interior, Thomas de Maizière, elogió la acción policial y el grado de coordinación entre las fuerzas de seguridad implicadas en el seguimiento y detención de los sospechosos.