El presidente del Parlamento venezolano, Diosdado Cabello, se plantó hoy, con el respaldo de toda la bancada oficialista, para rechazar la información del diario estadounidense "The Wall Street Journal" (WSJ) que le vinculó a él, uno de los hombres más fuertes del chavismo, con un cártel de narcotráfico y lavado de dinero.

Cabello consideró que se trata de una campaña en su contra para afectar al país petrolero y exigió a quienes han difundido las afirmaciones que presenten pruebas o que se preparen para las consecuencias.

La nueva batalla de Cabello se inició el lunes, después de que el periódico neoyorquino asegurase que la justicia estadounidense lleva años investigando a altos cargos chavistas, entre ellos a Cabello, bajo la sospecha de que han convertido al país sudamericano en un centro global de tráfico de cocaína y blanqueo de capitales.

"Hay grandes pruebas para justificar que (Cabello) no es solo uno de los jefes, sino el jefe del cártel", aseguraron al diario fuentes del Departamento de Justicia, que añadieron que el presidente del parlamento venezolano es "el principal objetivo" de la investigación.

Cabello habla de "fines políticos"

Cabello no solo rechazó los señalamientos sino que advirtió a los medios de comunicación que han publicado estas acusaciones que deberán asumir la responsabilidad de sus afirmaciones. Esta acusación tiene "fines políticos", dijo el diputado que prometió será "total y absolutamente irreductible" en esta batalla.

"Si mañana estos señores que me acusan presentan una prueba, condénenme", dijo el chavista, que aseguró además que, mientras eso no ocurra él seguirá "al frente", en el lugar que el fallecido Hugo Chávez le designó.

"Seguiré al frente, en el lugar que el comandante Chavéz me dijo, que eso no fue hace ya dos años, es un juramento que se remonta al año 1985", dijo.

Cabello aseguró que no se inhibirá ante "las presiones de medios internacionales" y advirtió a quienes "en Venezuela reprodujeron la noticia y todas las noticias" que se encontrarán en los tribunales de ese país. "Yo utilizo la ley que es lo que tengo a mano porque yo no voy a perseguir a nadie, yo no voy a asesinar", dijo.

Apoyo de la bancada oficialista

La Asamblea Nacional venezolana aprobó, con los votos de la mayoría chavista y la ausencia de casi toda la bancada opositora, una declaración en desagravio a Cabello por la publicación del diario estadounidense.

El acuerdo fue aprobado por la mayoritaria bancada chavista después de que la vicepresidenta del Parlamento, Tania Díaz, presentara una "moción de urgencia". El requerimiento de última hora fue hecho "a propósito de la campaña brutal, despiadada, de desinformación y de mentiras que se ha emprendido en su contra y que ha arreciado, se ha reeditado durante este fin de semana", dijo Díaz.

Según la diputada oficialista, "están atentando contra un héroe de la patria porque ha sido leal a esta revolución, leal al comandante (Hugo) Chávez y leal al pueblo venezolano". El documento suscrito por los diputados del chavismo, declaró Díaz, será presentado ante el Ministerio Público venezolano como parte de las acciones que emprenderán desde el Parlamento en defensa de Cabello.

Por su parte, el excandidato presidencial y gobernador del céntrico estado Miranda Henrique Capriles pidió que se investigue "la fortuna que han amasado altos funcionarios del gobierno, presuntamente implicados en narcotráfico y lavado de dinero" sin precisar mayores detalles.

El opositor señaló que el Gobierno debería investigar las "graves denuncias" en las que se presume que Venezuela "sirve de puente para el narcotráfico" en alusión a las información publicada por el diario estadounidense.

El pasado 27 de enero el diario español ABC publicó una información que aseguraba que Cabello estaría siendo investigado por la fiscalía federal del Distrito Sur de Nueva York por sus supuestos vínculos con el Cártel de los Soles.

Un mes después Cabello inició procedimientos administrativos y penales contra los medios venezolanos El Nacional, Tal Cual y La Patilla por reproducir esa información.

Con una demanda civil y otra penal, Cabello solicitó no solo la prohibición de salida del país de los propietarios y directores de estos tres medios, sino también "la prohibición de gravar (hipotecar), enajenar y vender" sus bienes.