El Gobierno francés inició el realojo de los 1.500 menores que malvivían en el campamento conocido como la "jungla" de Calais, ya desmantelado por las autoridades galas y donde se contabilizan unos 6.000 adultos.

Según informó a EFE un portavoz de la prefectura del departamento de Pas-de-Calais, se espera que los 1.500 menores sin compañía de adultos sean ubicados en alguno de los más de 400 Centro de Acogida Provisional (CAP) con la partida de unos 30 autocares desde Calais, a unos 300 kilómetros al noroeste de París.

Las autoridades francesas estudiarán ahora los casos de los menores -la mayoría afganos, sudaneses y eritreos-, pues muchos de ellos desean cruzar al Reino Unido para encontrarse con sus familiares.

En caso de que los chavales tengan el derecho a marchar al Reino Unido, las autoridades francesas negociarán con las británicas esos traslados.

Hasta el momento han sido 274 los menores solos que han cruzado legalmente al Reino Unido, según el Gobierno galo.

La situación de los 1.500 menores de Calais ha creado cierta tensión entre París y Londres desde que la ministra británica de Interior, Amber Rudd, alertase que ningún menor podía quedarse sin cobijo en territorio galo.

El Gobierno francés respondió que habían cumplido con su parte y emplazó a Londres a que asumiese con sus compromisos.

Un centenar de parlamentarios franceses llegó a mandar una carta a Rudd en la que recordó que a los niños y adolescentes les defienden dos leyes, la de Dublín III (directiva europea que promueve el reagrupamiento familiar) y la aprobada por el Parlamento británico en abril de 2016 (bautizada Ley Dubs por Alf Dubs, el parlamentario que la promovió).

Desde el 24 de octubre se iniciase el desmantelamiento del gigantesco campamento de Calais, los menores estaban en un centro provisional de acogida cercano mientras esperaban el traslado que hoy ha ocurrido.