Un total de 245 personas han sido detenidas por las fuerzas de seguridad de once países de la Unión Europea, entre ellos España, en una operación conjunta contra el tráfico de armas y explosivos desarrollada durante varios meses y coordinada por Europol.

La Guardia Civil española informó hoy de que con esta operación se ha evitado que las armas incautadas llegaran al mercado negro y se ha impedido que pudieran haber sido utilizadas para la comisión de delitos o desviadas a células yihadistas.

Los detenidos adquirían en países del este de Europa armas detonadoras que manipulaban para convertirlas en armas totalmente operativas que podían efectuar fuego real y disparar munición con proyectil.

Además de España, donde hubo 46 detenciones, participaron en la operación las fuerzas de seguridad de Rumanía, Grecia, Bélgica, Holanda, Polonia, Chipre, Finlandia, Suecia, Reino Unido y Bulgaria.

En total fueron detenidas 245 personas y se intervinieron 664 armas de fuego, 33.748 cartuchos, granadas de mano, silenciadores, cargadores y piezas fundamentales.