El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, afirmó este miércoles que "lamenta" si alguien se ofendió por sus declaraciones a un diario alemán en las que sugería que los países del sur derrochaban en "copas y mujeres", pero aseguró que no tiene intención de dimitir.

"Lamento si alguien se ofendió por el comentario. Fui directo y eso puede explicarse por la estricta cultura calvinista holandesa y el estilo directo holandés", dijo este miércoles Dijsselbloem a través de un portavoz después del revuelo que sucedió este martes a sus declaraciones.

Dijsselbloem aseguró que entiende que "esto no siempre es bien entendido y apreciado en otras partes de Europa", pero afirmó que, al mismo tiempo, es "apreciado por mantener su propio estilo" y dirigirse a todos los ministros a veces de forma "un tanto estricta".

Pese a ello, el también ministro de Finanzas holandés aseguró que no tiene "intención de dimitir", tal como ha pedido, entre otros, el Gobierno portugués.

Dijsselbloem, que este martes descartó disculparse por sus palabras y se mostró sorprendido por la repercusión que han tenido en la prensa española, insistió hoy en que su mensaje "fue malentendido" y lamentó que se haya interpretado como "el norte contra el sur", ya que él "no experimenta esa división, tampoco en el Eurogrupo".

Aseguró que "el mensaje de que la solidaridad va de la mano con el cumplimiento de los acuerdos y de las reglas no se aplica solo al sur, sino a todos los países".

"Creo que necesitamos ser claros, por el futuro de la unión monetaria y del Eurogrupo todos deberíamos dar lo mejor de nosotros y respetar las reglas. De otro modo, será muy difícil que sigamos juntos", dijo el holandés.

Los países del Sur, unos derrochadores

La polémica llega después de que en una entrevista con el diario alemán "Frankfurter Allgemeine Zeitung", Dijsselbloem sugiriese que frente a la solidaridad de los países del norte de la UE con los socios en crisis, algunos han derrochado dinero en "copas y mujeres".

"Durante la crisis del euro, los países del norte de la eurozona han mostrado solidaridad con los países afectados por la crisis", dijo Dijsselbloem al diario.

"Como socialdemócrata considero la solidaridad extremadamente importante. Pero quien la exige, también tiene obligaciones. No puedo gastarme todo mi dinero en copas y mujeres y luego pedir ayuda. Este principio se aplica a nivel personal, local, nacional y también a nivel europeo", añadió.