El ciberataque que afectó este viernes a 74 países aprovechó una vulnerabilidad del sistema operativo Microsoft Windows filtrada por un grupo de hackers el mes pasado y para la que la compañía tecnológica lanzó una actualización de seguridad en marzo.

Según informó 'The New York Times', la vulnerabilidad EternalBlue, utilizada por los autores del ataque para propagar un ransomware llamado WannaCry, fue filtrada en abril por el grupo de hackers Shadow Brokers, que ha estado aireando en Internet herramientas supuestamente empleadas por la Agencia Nacional de Seguridad (NSA).

Microsoft, que describió esta vulnerabilidad en el boletín de seguridad MS17-010, dijo que sus ingenieros añadieron este viernes "detección y protección contra el nuevo software malicioso, conocido como Ransom:Win32.WannaCrypt".

"Los que tienen en funcionamiento nuestro software gratuito de antivirus y tienen habilitado Windows Update están protegidos", explicó a CNBC la compañía tecnológica, quien aseguró estar asistiendo a sus clientes.

El 'ransomware' utiliza una vulnerabilidad de ejecución de comandos remota a través de SMB, y se distribuye al resto de máquinas Windows que haya en esa misma red.

Los sistemas afectados son: Microsoft Windows Vista SP2, Windows Server 2008 SP2 and R2 SP1, Windows 7, Windows 8.1, Windows RT 8.1, Windows Server 2012 and R2,Windows 10 y Windows Server 2016.

Miles de sistemas infectados

Entre las empresas afectadas en Estados Unidos se encuentra el gigante de los envíos por correo FedEx, cuyos sistemas basados en Windows estaban experimentando problemas este viernes debido al ataque de malware.

"Estamos implementando pasos para su rehabilitación lo más rápido posible. Lamentamos cualquier molestia a nuestros clientes", dijo el portavoz de FedEx, Jim McCluskey, en un comunicado.

Durante el día se produjeron entre 45.000 y 57.000 incidentes, según calcularon las firmas de seguridad Kaspersky y Avast, respectivamente.

Los ataques aprovecharon los sistemas operativos desactualizados de empresas o instituciones en todo el mundo, especialmente en Rusia, Ucrania y Taiwán, según el analista de malware de Avast, Jakub Kroustek.

Los autores del ciberataque piden un rescate en moneda electrónica para liberar los datos codificados en los ordenadores, que quedan bloqueados y comienzan una cuenta atrás hacia la subida del precio de la recompensa.

Entre los países afectados están España y el Reino Unido, donde el funcionamiento de decenas de compañías estatales y hospitales ha experimentado interferencias durante la jornada.

El ex analista de la NSA Edward Snowden, reclamado por la Justicia estadounidense por alta traición, criticó profusamente a la agencia de seguridad desde su cuenta de Twitter.

"A la vista del ataque de hoy, el Congreso debe preguntar a la NSA si conoce otras vulnerabilidades en el sofware que utilizan nuestros hospitales", reclamó Snowden.