China advirtió hoy de que "contraatacará" contundentemente ante las medidas arancelarias de Estados Unidos y aseguró estar preparada para pagar el precio de una guerra comercial que, aunque no desea, no tiene miedo a ella.

"Si EEUU persiste en su comportamiento de unilateralismo y proteccionismo comercial, ignorando la oposición de China y de la comunidad internacional, China va a seguir hasta el final a cualquier precio y contraatacará contundentemente", aseguró el Ministerio de Comercio chino en un comunicado.

Las autoridades chinas respondieron así a Donald Trump, que ayer anunció que estudia imponer 100.000 millones de dólares en aranceles a China, adicionales a los 50.000 millones ya anunciados a cientos de productos chinos, como respuesta a las tarifas con las que el gigante asiático castigó a Washington esta semana.

"No queremos una guerra comercial, pero no tenemos miedo a ella", reiteró el Ministerio de Comercio chino, que añadió que van a observar las acciones que tome ahora Washington pero que, "sin duda alguna", se tomarán nuevas medidas "para defender con contundencia el interés del país y de la gente".

Tras criticar de nuevo el proteccionismo adoptado por Trump frente al libre comercio, China insistió en que va a seguir con su reforma y apertura, la protección del sistema de comercio multilateral y la facilitación de la inversión global.

Como ya había advertido, Pekín presentó ayer formalmente ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) una denuncia contra EEUU por los aranceles impuestos a los productos chinos alegando que estas cargas exceden los tipos consolidados de EEUU y son incompatibles con el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GAAT).

La creciente tensión entre ambas potencias económicas ha provocado que el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, insistiera este viernes a la necesidad de diálogo, unas horas antes de viajar a China para participar en el Foro de Boao, un encuentro de líderes económicos y políticos considerado el "Davos Asiático".

El pasado martes, la Oficina del Representante de Comercio Exterior de EEUU (USTR, en sus siglas en ingles) publicó un listado que incluye 1.300 productos chinos -entre ellos aparatos de tecnología punta de las industrias aeroespacial y robótica- a los que quiere imponer aranceles.

Horas después, China anunció la imposición de aranceles del 25 % a un total de 106 nuevos productos importados desde EEUU, entre ellos soja, maíz, carne de vacuno, zumo de naranja, tabaco, automóviles o ciertos tipos de aviones, por valor de 50.000 millones de dólares.