La niña hondureña que aparece llorando en la próxima portada del Time -anticipada en las redes sociales- no es uno de los miles de menores separados de sus padres por las autoridades fronterizas de EEUU, según ha aclarado la publicación.

La revista ha elaborado un montaje con la imagen de esta niña mirando al presidente Donald Trump bajo el mensaje "Welcome to America" (Bienvenido a América) para denunciar la política migratoria de la Administración estadounidense.

Sin embargo, el impacto inicial de la composición ha dado paso a la controversia, ya que el padre de la pequeña informó de que su hija estaba junto a su madre en el momento en el que fue tomada la instantánea, que también ha sido utilizada por otros medios de comunicación con idéntico propósito.

Time agregó al final de un texto publicado el pasado martes una corrección en la que advierte que "describió erróneamente" lo que le sucedió a la niña.

Según la revista, la pequeña no fue llevada gritando por los agentes fronterizos, sino que su madre la recogió y ambas fueron trasladadas juntas.

El autor de la imagen, el fotógrafo de agencia John Moore, detalló cómo fotografió la secuencia de la detención de la mujer acompañada por la pequeña, ambas procedentes de Honduras, pero aseguró que desconocía qué pasó con ellas después.

En una declaración al canal CBS, el agente de la patrulla fronteriza Carlos Ruiz señaló que la fotografía está siendo usada para "simbolizar una política", pero aclaró que "ese no era el caso".

Ruiz explicó que la niña, vestida de chaqueta y zapatos rosados, empezó a llorar tan pronto su madre la puso a su lado mientras era requisada por los agentes que la retuvieron por cruzar ilegalmente el río Bravo hacia Texas.

"Fui con la madre y le pregunté: ¿Está bien? ¿Está bien la niña?", aseguró Ruiz, quien relató que la mujer le aseguró que la menor estaba cansada y sedienta, ya que eran las 11 de la noche.

Fuentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) le confirmaron además a CBS que ambas permanecen en un centro en Texas.

Mientras, el padre de la menor, identificado como Denis Javier Varela Hernández, le dijo al The Washington Post que reconoció "inmediatamente" a su hija tan pronto vio la fotografía y que recibió una llamada de un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de su país que le informaba que estaba junto a su esposa.

"Este es el caso de mi hija, pero no es el caso de 2.000 niños que fueron separados de sus padres", apuntó Varela, quien se dijo orgulloso de que su hija haya representado la imagen de la migración.

Pero las críticas contra la publicación, entre ellas del hijo del presidente, Donald Trump Jr, y de la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, no se hicieron esperar y no faltaron las voces que calificaron la portada de "fake news".