El ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, dio una rueda de prensa este jueves en la que pididó levantar el embargo de armas en Libia y acabó hablando de la inmigración y los refugidos, tema polémico en Italia en los últimos días.

El ministro italiano aseguró que el objetivo es que "nadie llegue más a bordo de pateras" tras haber cerrado los puertos a las ONG que rescatan a inmigrantes en el Mediterráneo central, y apostó por una inmigración "tranquila y segura", haciendo incluso que las personas con derecho al estatus de refugiado "lleguen a Italia en avión, incluso en primera clase", por lo que defendió la posibilidad de abrir corredores humanitarios.

Por otro lado, el ministro apostó por levantar el embargo de armas a Libia para que ese país pueda hacer frente a los traficantes de seres humanos en el Mediterráneo y frenar así el flujo migratorio hacia Europa.

Salvini explicó que este es uno de los puntos de colaboración acordados este jueves en un encuentro en Roma con el vicepresidente del Consejo Presidencial del Gobierno libio de Unión Nacional en Trípoli, reconocido por la ONU, Ahmed Maitig.

El ministro abogó por "el fin del embargo" porque, a su juicio, los traficantes de personas "se arman como quieren" y "los únicos que quedan bloqueados son las autoridades legítimas y reconocidas".

Por ello, adelantó que la semana próxima se reunirá con el enviado de la ONU para Libia, Ghassan Salamé, pues pidió la "implicación" de la comunidad internacional y de la Unión Europea.

"Estamos dispuestos y somos capaces de operar con todos los medios que sean necesarios una vez que acabe el embargo" para frenar el fenómeno migratorio y hacer frente a las mafias, declaró por su parte Maitig en la misma rueda de prensa. Y aseguró que no tendrían problemas económicos para comprar medios navales para estos fines.

El embargo de armas a Libia fue impuesto por la ONU en 2011 en medio de los enfrentamientos entre el régimen de Muamar el Gadafi y la oposición, y actualmente tiene como objetivo principal evitar el suministro de armamento a las distintas milicias y grupos terroristas que operan en el país.

Por el momento, Italia desde 2011 ha donado varias naves, y el nuevo Ejecutivo, del antisistema Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga, ha anunciado que entregará a las autoridades libias 12 patrulleras.

Centros de inmigrantes

Preguntados ambos por las difíciles condiciones que se viven en los centros para inmigrantes en Libia, denunciados por numerosas organizaciones internacionales, Salvini dijo que "si se les permitiera gastar el dinero, quizá las situaciones serían menos difíciles".

Salvini se reunirá la próxima semana en Innsbruck, en Austria, con su homólogo alemán, Horst Seehofer, y el canciller austríaco, Sebastian Kurz, para abordar la cuestión migratoria y, según dijo, trabajar para alcanzar "un punto de recíproca satisfacción".

Ante los movimientos secundarios de los inmigrantes, que pasan de un país a otro en la Unión Europea, Salvini avanzó que "antes de recibir de nuevo a un solicitante de asilo que llegue de otros países europeos, tiene que haber compromisos concretos" de Europa en la protección de la frontera exterior sur, el Mediterráneo.