Los equipos de rescate han conseguido sacar del interior de la cueva de Tailandia a tres de los cinco integrantes de un grupo de niños y su monitor que quedaron atrapados hace dos semanas, lo que eleva a diez el total de rescatados.

Un testigo de Reuters ha visto a dos personas que eran sacadas en camillas de la cueva de Tham Luang en el que es el tercer día de la operación que busca rescatar a los doce niños y su monitor. Nueve de los menores han sido rescatadas, en dos tandas de cuatro, en los dos últimos días.

Narongsak Osottanakorn, el jefe de la misión de rescate, había indicado previamente que "si no sale nada mal, los cuatro chicos y el entrenador, junto con el doctor y los tres SEAL que están con ellos, abandonarán la cueva juntos hoy".

El responsable ha reconocido que "la misión de hoy es más difícil que las de los dos últimos días, ya que hay que sacar a nueve personas". En las tareas de rescate participarán unas 100 personas, incluidos los 19 submarinistas encargados de extraer desde el interior de la cueva a los atrapados.

Las autoridades sanitarias de Tailandia confirmaron que los ocho niños rescatados hasta este miércoles se "recuperan" y no sufren problemas de gravedad.

Los doctores han analizado la sangre y los pulmones de los menores, además de proveer de manera intravenosa suero para mejorar sus defensas e inyectarles varias vacunas, dijo en rueda de prensa el secretario para la Salud Pública, Jetsada Chokedamrongsuk.

Tras el rescate de los menores, cuatro el domingo y otros cuatro el lunes, fueron trasladados para evaluar su estado de salud al hospital de Chiang Rai, capital de la provincia homónima y donde se encuentra la gruta.

Dos de los niños que fueron rescatados el domingo muestran leves irregularidades en su respiración, por lo que los facultativos sospechan que pueden sufrir de un principio de neumonía.

Los cuatro primeros llegaron con signos de hipotermia, debido a las duras condiciones que afrontado en la gruta y durante la etapa de buceo que tenían que superar para salir al exterior.

Otro de ellos tiene un pequeño corte en la pierna derecha.

"Se está alimentando a los niños con comidas suaves y de fácil digestión", indicó el doctor Jetsada, al incidir en la pérdida de peso de los chavales.

Ninguno tiene fiebre y se les está dando apoyo psicológico.

El facultativo incidió en que los ocho continuarán ingresados al menos una semana más.

Los chicos rescatados aún no han podido tener contacto directo con sus familiares, quienes han tenido que verlos a través de un cristal para prevenir que les pudieran contagiar alguna enfermedad debido al débil sistema inmunológico de los rescatados.

"Echamos de menos nuestra casa" y "estamos felices", son algunas de las primeras palabras que dijeron los escolares, de entre 12 y 14 años, al llegar al centro sanitario.

El grupo, formado por integrantes de un equipo de fútbol juvenil, puede ver a través de un monitor los partidos del Mundial de Rusia, pero Jetsada rechazó por causas médicas la invitación de la FIFA para que pudieran ver en directo la final del campeonato, el próximo domingo.