El Gobierno venezolano ha ordenado la suspensión de la jornada laboral y lectiva de este viernes por el corte de suministro ocurrido la pasada noche en la principal central hidroeléctrica de Venezuela, que ha dejado sin energía a gran parte del país.

El presidente Maduro "ha suspendido las clases y jornadas laborales el día de hoy, en aras de facilitar los trabajos y esfuerzos para la recuperación del servicio eléctrico en el país, víctima de la guerra eléctrica imperial!", ha publicado la vicepresidenta Delcy Rodríguez en su cuenta de Twitter.

Los cortes de energía eléctrica son frecuentes en la nación, miembro de la OPEP, que lleva cinco años padeciendo una recesión con hiperinflación y un deterioro en la calidad de los servicios públicos.

Debido al apagón, el servicio de telefonía móvil se ha visto afectado y las líneas del metro de Caracas dejaron de operar. Ante la falta de transporte, cientos de personas caminaban por las principales avenidas de la capital venezolana.

El fallo eléctrico se ha producido en el inicio del horario de mayor afluencia de pasajeros en el metro de Caracas, que cuenta con unas 40 estaciones y moviliza diariamente a unas tres millones de personas, según sindicalistas.