El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, desvelará este miércoles su oferta final a la Unión Europea (UE) para alcanzar un acuerdo en torno al Brexit y mantendrá que el 31 de octubre es la fecha final para ello.

El 'premier' aprovechará su discurso ante la conferencia del Partido Conservador para reiterar que el Brexit "se puede, se debe y se hará" el 31 de octubre, según extractos del texto difundidos por su oficina y recogidos por los medios británicos.

Johnson llegó a Downing Street en julio bajo la promesa de sacar al país de la UE el 31 de octubre "con o sin acuerdo" de por medio. A un mes de esa fecha, y pese a una ley que teóricamente le obligaría a pedir una prórroga, la salida desordenada sigue sin estar descartada al cien por cien.

El escollo principal está en la frontera irlandesa. El Gobierno irlandés rechazó este martes las propuestas que el primer ministro británico quiere presentar a Bruselas para solucionar la cuestión de la salvaguarda fronteriza y lograr una salida de la Unión Europea negociada.

Varios medios británicos e irlandeses ha informado de que Londres tiene una alternativa a la salvaguarda, pensada para evitar una frontera dura entre las dos Irlandas y que contempla mantener a la provincia de Irlanda del Norte alineada con ciertas normas del mercado único y la unión aduanera, pero que ha sido rechazada por los diputados británicos.

El lema del Partido Conservador en su congreso anima a convertir el Brexit en realidad. Foto: REUTERS

El Ejecutivo de Dublín advirtió de que el "plan B" de Johnson no es viable y reiteró que aún espera que el Reino Unido presente una "propuesta seria" para lograr un "brexit" ordenado antes del 31 de octubre, la fecha límite fijada para este divorcio.

A cambio de la salvaguarda, según los medios, Londres ofrecerá crear centros aduaneros lejos de la frontera entre los dos territorios para que los trámites de aduana de las mercancías se hagan a través de dispositivos móviles fijados en los vehículos o con la ayuda del sistema de navegación conocido como GPS.

La salvaguarda, que Johnson exige sea eliminada del acuerdo negociado por su predecesora -la también conservadora Theresa May-, tiene como objetivo evitar una frontera entre las dos Irlandas, clave para sus economías y el proceso de paz.

No obstante, el Reino Unido se opone a la polémica salvaguarda porque ese arreglo podría demorarse demasiado mientras Londres y Bruselas negocian su futura relación comercial, y los unionistas probritánicos temen que la región quede aislada indefinidamente.

Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, consideró hoy que es "posible" lograr una "salida ordenada" del Reino Unido de la Unión Europea, y vinculó en parte la caída mundial de inversiones a no haber alcanzado todavía un acuerdo sobre el "brexit".

Merkel dijo en una comparecencia ante la prensa que "nadie sabe" si esa salida del Reino Unido de la UE se hará de manera ordenada, pero agregó: "En eso trabajamos y (eso es lo que) todavía considero posible, o si no sí que se producirán fricciones más fuertes".