El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha sido citado a declarar en el marco de la investigación sobre el asesinato de la concejala y activista Marielle Franco, que fue abatida junto al conductor del vehículo en el que viajaba en la zona norte de Río de Janeiro a mediados de marzo de 2018.

Según la pesquisa, los sospechosos de haber cometido el crimen estuvieron horas antes en la casa del entonces diputado federal y ahora dirigente del país, tal y como ha informado el Partido Socialismo y Libertad (PSOL).

Tras conocerse la noticia, Bolsonaro negó este martes, completamente exaltado, cualquier vinculación con el asesinato, e insultó a la televisión Globo, que reveló que su nombre aparece en las investigaciones.

Encolerizado, Bolsonaro, quien se encuentra en Arabia Saudí, publicó un vídeo de 23 minutos repleto de descalificaciones en el que cargó duramente contra Globo y contra el gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, a quien acusó de filtrar la investigación bajo secreto de sumario en curso.

"Paren de traicionar Brasil, quieren acabar con Brasil", clamó el gobernante ultraderechista en el vídeo, divulgado en su madrugada.

De acuerdo con Globo, el portero de la urbanización donde vivía Bolsonaro en Río de Janeiro afirmó, en una declaración a la policía, que uno de los acusados de asesinar a la concejala apareció en el condominio el 14 de marzo de 2018, día en el que Marielle Franco fue ejecutada.

El portero, según Globo, relató que el expolicía Élcio Queiroz, acusado de conducir el automóvil desde el que se realizó el brutal crimen, mediante cuatro disparo a la cabeza de la concejala cuando ella se encontraba en otro vehiculo cuyo conductor también resulóo muerto, afirmó en la entrada de registro que se dirigía a casa de Jair Bolsonaro, entonces diputado federal.

La entrada, de acuerdo con el portero, fue autorizada por alguien en el interior de la casa de Bolsonaro, pero Queiroz, sin embargo, acabó dirigiéndose al domicilio de Ronnie Lessa, acusado de haber sido el autor de los disparos que mataron a la concejala y quien vive en la misma urbanización que el presidente brasileño.

No obstante, el Jornal Nacional comprobó el registro de la Cámara de los Diputados y mostró que Bolsonaro se encontraba en Brasilia el 14 de marzo de 2018, un hecho que fue reiterado por el mandatario en su vídeo.

"O el portero mintió o indujeron al portero a cometer falso testimonio o escribieron algo en investigación que el portero no leyó y firmó. ¿Cuál es la intención? Siempre la misma, todo el tiempo están encima de mi familia, de mis hijos y de quien está próximo a mí", resaltó Bolsonaro, enfurecido.

Bolsonaro denunció que quieren destruirle y sugirió que Globo, cadena televisiva a la que tildó de "canalla", está creando una narrativa para apartarle de la presidencia.

"Tengo un compromiso, el de sacar a Brasil del agujero, a pesar da la prensa sucia, asquerosa, canalla e inmoral, como es Globo de Radio y Televisión", agregó el mandatario brasileño.

"Vamos a resistir, la verdad está de mi lado. Quiero servir a mi patria como presidente de la República", señaló.

El Partido Socialismo y Libertad (PSOL), formación a la que pertenecía Marielle Franco, informó de que, tras la divulgación realizada por la televisión Globo, pidió una audiencia "inmediata" con el presidente del Tribunal Supremo de Brasil, José Antonio Dias Toffoli.

"Exigimos esclarecimientos inmediatos. El PSOL nunca hizo ilación alguna entre el asesinato (de Marielle Franco) y Jair Bolsonaro. Pero las informaciones de hoy son muy graves. Brasil no puede convivir con ninguna duda sobre la relación entre un presidente de la República y un asesinato", señaló el partido en un comunicado.

"Las autoridades responsables de la investigación necesitan manifestarse. Exigimos respuesta. Exigimos respuesta para Marielle y Anderson (Gomes, el conductor que fue asesinado junto con la concejal)", subrayó.