Verónica García Fuentes, de 36 años, dio positivo en coronavirus a mediados de diciembre. Lo ocultó a su familia por miedo y, 42 días después, tanto ella como su marido y sus tres hijos menores de edad habían fallecido. Los hechos sucedieron en Táchira, Venezuela.
La mujer, con fiebre alta, estornudos continuos y malestar general, acudió al hospital a hacerse una PCR el pasado 17 de diciembre. Tras dar positivo en Covid, se aisló en una habitación de su vivienda pero no trasladó a su familia que tenía esta enfermedad.
Con el paso de los días, su pronóstico empeoró debido a la falta de tratamiento y tuvo que ser ingresada con neumonía el 14 de enero. Poco a poco, el resto de la familia empezó a tener síntomas. Todos dieron positivo en coronavirus.
El primero fue el padre, José Antonio Gómez, de 33 años. Cuando acudió al hospital, "tenía los pulmones negros", según el médico que le atendió. También fue hospitalizado el 16 de enero.
El lunes 18 de enero falleció Verónica y un día después perdió la vida el marido. La hija mayor, de 17 años y con una condición neurológica especial, fue la siguiente víctima. Tras varios día con fiebre, tos y problemas para respirar murió mientras iba camino al hospital.
Los dos hijos pequeños, de cuatro años, fueron los últimos en perder la vida. El 27 de enero ingresaron en el hospital con bronconeumonía. Ese mismo día fallecieron.
La muerte de los cinco integrantes de la familia Gómez García ha abierto un debate en el país. Los sanitarios han pedido a la población que reflexione sobre la gravedad de este virus y la necesidad de recibir tratamiento a tiempo.
