Al menos 304 personas han perdido la vida en Haití como consecuencia del terremoto sufrido este sábado por el país caribeño, según un nuevo balance de Protección Civil, que estima que hay "cientos de heridos y desaparecidos" por el seísmo.

La mayor parte de las víctimas mortales corresponde al departamento Sur, donde se han confirmado ya 158 fallecidos, ha informado el organismo en su cuenta de Twitter. Los hospitales siguen recibiendo heridos por el terremoto de magnitud 7,2 en la escala de Richter.

El potente seísmo, que ha provocado siete réplicas con magnitud superior a 4 en las cuatro horas posteriores, ha tenido lugar a las 08.29 (las 14.29, hora peninsular española), a unos 12 kilómetros de la localidad de Saint-Louis du Sud, y con un hipocentro a 10 kilómetros de profundidad, de acuerdo con el informe del Instituto Geólogico de Estados Unidos (USGS). Se activó una alerta de tsunami que posteriormente fue retirada.

Este organismo ha emitido una alerta roja ante la posibilidad de que el seísmo haya dejado un gran número de víctimas, algo que ya comenzaron a reconocer las autoridades locales con las primeras imágenes que llegaban de los lugares afectados. La destrucción ha sido particularmente notoria en la zona de Les Cayes, donde se han derrumbado los hoteles de Le Manguier y Petit pas Hotel, según el diario 'Le Nouvelliste'.

Responsables de Protección Civil han comparecido en rueda de prensa para confirmar un primer balance de 29 fallecidos, si bien han reconocido que siguen analizando el alcance de la tragedia. Han advertido igualmente de los riesgos de futuras réplicas, que podrían provocar nuevos derrumbes.

Haití, considerado el país más pobre del hemisferio occidental, aún vive con el impacto del catastrófico terremoto de 2010 que dejó unas 200.000 personas muertas. El país también vive un estado de agitación política desde el asesinato en julio del presidente Jovenel Moise.

En cuanto al posible impacto económico de este nuevo sismo, el USGS emitió una alerta naranja, que implica que "es probable que haya daños significativos", y que las pérdidas económicas estimadas son de "entre el 0 y el 3% del PIB de Haití". Recordó que la mayoría de la población de la zona afectada por el sismo "reside en estructuras que son vulnerables a los temblores de un terremoto", como aquellos construidos con barro o adobe.

El sismo se sintió con intensidad "muy fuerte" en Saint-Louis du Sud, Aquin y otras localidades del suroeste del país, mientras que se notó de forma "moderada" en Puerto Príncipe, "ligera" en Kingston (Jamaica) y "débil" en Santo Domingo (República Dominicana), según el USGS.

El primer ministro de Haití, Ariel Henry, ha dado orden de movilizar por completo "todos los recursos" del Gobierno haitiano para ayudar a las víctimas y apelado a la cooperación de la población para salvar esta nueva tragedia. Con este fin, ha anunciado que declarará el estado de urgencia.

"Extiendo mi más sentido pésame a los padres de las víctimas de este violento terremoto que provocó varias pérdidas de vidas humanas y materiales en varios departamentos geográficos del país", ha indicado el mandatario.

Henry ha confirmado que la mayor parte de los daños se han concentrado en el suroeste del país, concretamente en los departamentos de Sur, Grand'Anse y Nippes. Es a esa región donde Henry ha declarado que tiene intención de viajar en las próximas horas "para evaluar la situación en su conjunto".

"Quiero hacer un llamamiento al espíritu de solidaridad y compromiso de todos los haitianos, para unirnos frente a esta dramática situación que vivimos actualmente. La unión hace la fuerza", ha dicho en una serie de mensajes publicados en su cuenta de Twitter.