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Tensión en el este de Europa

¿Por qué Rusia quiere invadir Ucrania? Las 5 claves del conflicto

Un soldado de Ucrania durante el conflicto con los separatistas prorrusos en el este del país, en mayo del 2019.

Suenan tambores de guerra en Europa del Este con visos de verosimilitud. Rusia vuelve a amenazar a Ucrania, la exrepública soviética que flirtea con Occidente, al desplazar miles de tropas a la frontera que comparten. A día de hoy, nadie duda de la voluntad de Moscú de invadir Ucrania. Pero la partida que se juega en el territorio ucraniano es mucho más que un encontronazo local. EEUU y la OTAN, del lado ucraniano, y Rusia, vuelven a establecer un pulso por la hegemonía mundial. A continuación, unas claves ayudan a entender la envergadura del desafío entre los antiguos actores de la Guerra Fría.

La decisiva cumbre de la OTAN de 2008

Para entender el nuevo episodio del conflicto ucraniano hay que remontarse a la cumbre de la OTAN de 2008 cuando se acordó que Ucrania y Georgia entrarían a formar parte de la Alianza Atlántica, sin más concreción temporal. Fue la última reunión del bloque a la que asistió Vladímir Putin, hace 13 años en Bucarest. Y George W. Bush fue el presidente estadounidense que presionó para abrir las puertas de la alianza a las dos exrepúblicas soviéticas. Putin describió la propuesta como "una amenaza directa para Rusia". Aquella promesa, sin fecha ni hoja de ruta, sigue siendo un casus beli para el presidente ruso.

Frenesí diplomático para evitar la guerra

Durante los últimos meses, Rusia ha desplegado 100.000 soldados en la frontera que comparte con Ucrania hasta el punto de que el propio presidente de EEUU, Joe Biden, ha dado por hecho una intervención rusa, despertando el temor de los aliados de la OTAN. La confrontación militar intenta evitarse en reuniones de alto nivel entre Rusia, EEUU y la OTAN. Los expertos hablan de la actividad diplomática más frenética desde la guerra de los Balcanes. Putin sigue exigiendo que Ucrania no sea aceptada en la OTAN mientras la organización insiste en que la promesa de incorporar a la exrepública sigue en vigor. Tras varias reuniones al más alto nivel sin resultados excesivamente esperanzadores, el frenesí diplomático no cesa con el objetivo último de evitar el enfrentamiento bélico.

El precedente de la anexión de Crimea en 2014

No es la primera vez que Rusia coloca sus tropas, amenazante, en la frontera ucraniana. El precedente más cercano y de consecuencias más graves se produjo en 2014 cuando Rusia invadió la disputada península de Crimea después de que el presidente ucraniano, pro ruso, fuera depuesto. Además, los separatistas ucranianos de la región de Donbás, apoyados por Moscú, se apoderaron de amplias zonas del este de Ucrania. Los rebeldes han combatido al Ejército ucraniano desde entonces en un conflicto que se ha cobrado más de 14.000 vidas.

Guerra "económica"

El presidente Biden ha amenazado al líder ruso con medidas "como nunca ha visto" si Ucrania es atacada. Más allá del flanco militar, EEUU baraja la coerción económica. Por ejemplo, desconectar el sistema bancario ruso del sistema internacional de pagos Swift. Otra amenaza clave es impedir la apertura del gasoducto ruso Nord Stream 2 en Alemania, cuya aprobación está siendo decidida por el regulador energético alemán. También podría haber medidas dirigidas al fondo soberano ruso RDIF o restricciones a los bancos que conviertan rublos en moneda extranjera.

Putin pide a la OTAN que vuelva a las fronteras anteriores a 1997

En realidad, Rusia quiere que la OTAN vuelva a sus fronteras anteriores a 1997. Exige que no haya más expansión y que se ponga fin a la actividad militar de la OTAN en Europa del Este. Eso significaría la retirada de unidades de combate de Polonia y de las repúblicas bálticas de EstoniaLetonia y Lituania, y la imposibilidad de desplegar misiles en países como Polonia y Rumanía.

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