La presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, la demócrata Nancy Pelosi, anunció este martes que se presentará a la reelección en los comicios legislativos de noviembre. Sin embargo, Pelosi, de 81 años, no reveló si tiene intención de seguir al frente del liderazgo demócrata y si optará a la Presidencia de la Cámara Baja, en caso de que los demócratas mantengan la mayoría. En 2018, la demócrata prometió a miembros de su partido que este sería su último mandato como presidenta de la Cámara Baja, pero posteriormente se resistió a confirmar su salida de la primera línea política.

En un vídeo en Twitter, Pelosi anunció este martes que se presenta a la reelección y citó la necesidad "crucial" de defender la democracia estadounidense. "Aunque hemos hecho progresos, se necesita hacer mucho más para mejorar la vida de la gente. Nuestra democracia está en riesgo por los asaltos a la verdad, el asalto al Capitolio y los asaltos al derecho al voto estado por estado. Estas elecciones son cruciales. Nuestra democracia está en riesgo, nada menos", manifestó. Y añadió: "Pero nosotros no agonizamos, nos organizamos. Y por eso me postulo a la reelección al Congreso y respetuosamente busco su apoyo. Me sentiría muy honrada y agradecida por ese apoyo".

Elegida en 1987 para representar un distrito de California, Pelosi ha ejercido como presidenta de la Cámara Baja en dos ocasiones: entre 2007 y 2013, y desde 2019, cuando fue elegida con la misión de ser el principal rostro de la oposición frente al entonces presidente republicano, Donald Trump (2017-2021). Pelosi demostró que sabía ganar a Trump con gestos que abrieron la portada de periódicos y se hicieron muy populares en las redes sociales.

Uno de esos momentos se produjo durante en enero de 2020 durante el discurso sobre el Estado de la Unión que Trump ofreció ante las dos cámaras del Congreso. Cuando el discurso acabó y mientras los republicanos aplaudían a rabiar, con un gesto de desdén, Pelosi agarró las páginas con la copia del discurso de Trump y las fue rompiendo en dos a una altura suficiente para que lo captaran las cámaras de televisión, en una señal de su amarga relación con el presidente. Cuando los periodistas le preguntaron luego por qué lo hizo, Pelosi respondió que le pareció "lo más cortés que podía hacer" después de ese "discurso tan sucio". A cambio, Pelosi ha concentrado los odios de buena parte de los republicanos, que la han tachado de "izquierdista radical" en múltiples anuncios electorales.

El 8 de noviembre, Estados Unidos celebrará elecciones legislativas o de medio mandato, que serán un termómetro sobre la gestión del presidente estadounidense, Joe Biden, casi dos años después de asumir el poder. Históricamente, el partido del inquilino de la Casa Blanca suele salir perdiendo en esas elecciones de medio mandato y, actualmente, las encuestas muestran que los republicanos podrían hacerse con la Cámara de Representantes.