“Nuestro apoyo en este momento es crítico porque la guerra se encuentra en un punto de inflexión. No podemos permitir que Ucrania se quede sin equipamiento militar porque la batalla en el Donbás está en un momento en el que la contraofensiva de los ucranianos, empujando a los rusos, está teniendo algunos éxitos extraordinarios y los 500 millones adicionales elevarán a 2.000 millones el apoyo militar total de la UE”, ha anunciado el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell, tras el aval político del consejo de ministro de defensa de la UE a un nuevo desembolso europeo para seguir financiando la compra de armas a Ucrania. 

Una aportación que se suma al esfuerzo individual que siguen haciendo los Estados miembros y que, según el jefe de la diplomacia europea, es “mucho más de lo que la gente cree” y algo que hay que seguir haciendo “hasta el final”. Según ha asegurado, los Veintisiete tienen “suficientes recursos” para seguir apoyando al mismo ritmo a Ucrania, que ha demostrado a su juicio una capacidad “increíble” de resistir y contraatacar, aunque ha eludido pronunciarse sobre cuánto tiempo podría “resistir” Rusia

“No me atrevo a pronosticar cuánto tiempo puede resistir Rusia. Y estamos usando el verbo resistir aplicado a Rusia. Pero si es cierto que Rusia ha perdido el 15% de sus tropas al principio de la guerra, este es un récord mundial de pérdidas de un ejército que invade otro país. No se si pueden reponer pero el nivel de perdidas del ejército ruso es impresionante”, ha añadido recordando que si de algo ha servido hasta ahora la guerra de Rusia en Ucrania es para que los Veintisiete se den también cuenta de hay que prepararse para situaciones de guerra. “Estoy seguro de que los Estados miembros comprenden que para gastar mejor hay que gastar conjuntamente. El gasto ha ido cayendo y ahora lo que se trata es de incrementar y hacer las cosas de otra manera”, ha reivindicado.

La cita ha coincido también con la confirmación de la solicitud de adhesión a la OTAN de Finlandia y Suecia, una incorporación con la que han cerrado filas y que supondrá un cambio geopolítico importante. “Pueden contar con nuestro pleno apoyo”, ha recordado el jefe de la diplomacia europea que confía en una adhesión rápida. ¿Qué mensaje envía esto a Vladímir Putin? "No creo que los suecos y los finlandeses hayan enviado un mensaje a Putin. Le he escuchado decir que no se siente preocupado por esta decisión y eso me alegra", ha dicho Borrell en rueda de prensa.

Misión en Malí

Los ministros de defensa también han confirmado la decisión de terminar con la misión europea de formación del ejército de Mali. "No tenemos garantías de las autoridades de transición de no interferencia de los mercenarios rusos (del grupo Wagner). Al contrario, hemos visto un aumento de abusos de derechos humanos que están siendo investigados por Naciones Unidas y la ultima decisión lamentable de Mali de salirse del G7 Sahel.

Así que hemos reafirmado nuestra decisión de hace un mes de suspender la misión operativa de formar a las fuerzas de Mali y el envío de material militar bajo el Fondo Europeo para la Paz que estaba en marcha”, ha explicado el jefe de la diplomacia europea. La decisión de poner punto final a la cooperación con la formación de las tropas de Malí no significa que la Unión Europea abandone el país aunque en las próximas semanas presentarán una revisión estratégica de la misión. 

Al revés, queremos hacer más y mejor y para eso vamos a reasignar nuestros recursos militares en los países vecinos”, ha explicado Borrell. La idea es reducir la presencia militar en Malí, donde cuentan actualmente con un millar de efectivos, y redistribuirlos en otros países de la zona como Niger. “Para hacer las maletas e irnos todos necesitamos una decisión por unanimidad del Consejo. No se ha planteado el tema. La misión no se anula, permanece, pero la vamos a redimensionar y redefinir”, ha añadido.