Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Tensión en el país anatolio

Arranca el juicio contra el alcalde de Estambul, principal rival de Erdogan, por la supuesta falsificación de su diploma universitario

Ekrem Imamoglu, edil de la gran metrópolis turca, está en prisión desde marzo de este año, y su detención desencadenó una ola de protestas y represión masiva que aún perdura

Imagen de archivo del líder opositor turco Ekrem Imamoglu.

Imagen de archivo del líder opositor turco Ekrem Imamoglu. / EMRAH GUREL / AP

Adrià Rocha Cutiller

Adrià Rocha Cutiller

Estambul

El ahora sustituido alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu, ha aparecido este viernes ante el juez en la primera vista de uno de sus múltiples casos en contra. Imamoglu, encarcelado en marzo de este año, ha visto cómo en su contra han sido abiertos un mínimo de ocho casos e investigaciones judiciales, las más graves, por supuestamente liderar una "mafia de corrupción" y "tener vínculos con grupos terroristas"

La vista de este viernes es por supuestamente "haber falsificado su diploma universitario" conseguido hace 30 años, que le fue revocado precisamente la noche antes de su detención. En Turquía, es imperativo legal que un candidato a la presidencia —como es Imamoglu— tenga un título de universidad superior. La oposición, de hecho, achaca al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que nunca ha enseñado el suyo. 

Imamoglu, que niega rotundamente todas las acusaciones y que es, de hecho, el número uno en las encuestas, asegura que la suya es una persecución política para acabar con el principal rival político de Erdogan

Esta persecución, además, no es solo contra su persona: el principal partido de la oposición turca, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), ha sido el objetivo durante las últimas semanas de varios ataques judiciales y políticos, también en Estambul, contra el liderazgo de la formación. 

La policía, incluso, ha llegado a bloquear y tomar la sede del CHP en la gran metrópolis turca, sin orden judicial que así lo haya pedido. Y hay más: el lunes de la semana que viene la justicia decidirá si impone un interventor a la secretaría general del partido, lo que descabezaría a la formación y expulsaría a su actual líder, el combativo y cada vez más popular Özgür Özel. La presión es total y desde todos lados.

Juicio mediático

Ante el juez, decenas de seguidores, miembros del partido y abogados cercanos al alcalde detenido han arengado a Imamoglu, que incluso se ha mostrado feliz y sonriente y ha regalado su corbata y chaqueta a los asistentes, a sabiendas de que el suyo es el juicio más mediático de las últimas décadas en Turquía. "Presidente Imamoglu", gritaban los asistentes. 

"Nada de lo que dice tiene que ver conmigo, su señoría", dijo Imamoglu tras escuchar las acusaciones de la fiscalía. "A mí no me molesta escuchar, pero espero que la persona que de verdad no tiene diploma universitario también lo haga", ha continuado el alcalde de Estambul, en una referencia velada a Erdogan. En las protestas que siguieron a su encarcelamiento, decenas de personas fueron detenidas por gritar cánticos con la misma afirmación.

La posibilidad, así, de que la justicia turca descabece por completo al CHP —con la posible imposición la semana que viene de un interventor en su liderazgo—, ha relanzado las manifestaciones en Estambul, que están volviendo a ocurrir tras un verano de menos multitudes.

"Lo que están haciendo a nuestro partido es malvado, y esperamos que esta maldad termine pronto. No quiero a gastar mi energía más en esto. Ahora estamos pensando en lo mejor, en el futuro, y preparándonos para luchar contra lo peor", ha dicho el líder del CHP, Özgür Özel, a la salida del juicio de Imamoglu.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents