Quiero manifestar mi opinión acerca del desorbitado salario que cobran algunos deportistas. Entiendo y comparto la necesidad de premiar el talento o habilidad que tienen algunas personas, pero en su justa medida, pues también requiere de una gran habilidad además de cuantiosos conocimientos, y una gran dedicación trabajos como la medicina que se ven menospreciados con esa enorme desigualdad salarial. Y aunque me considero un gran amante del deporte, no puedo obviar el hecho de que si se redujeran esas desorbitadas mensualidades se podrían llevar a cabo iniciativas que favorecieran al conjunto de la sociedad. Borja Carbonell Alba. Alginet.