El otro día estaba viendo La vida con Samanta, donde entrevistaba a Netta Barzilai, la última ganadora de Eurovisión. Ella revelaba su pasado oscuro, en el cual le hacían bullying, por ser la gorda y la cejuda, distinta a los demás... «Que cantara como la cantante de jazz (Aretha Franklin), una voz de negra o la voz de Adele, como una chica grande, eso era lo que se esperaba de mí». ¿Por qué pasa esto?... porque nuestra sociedad es muy superficial e hipócrita y la imagen nos condiciona. Pensándolo bien desde los anuncios que veo todos los días en la televisión o en las revistas, desde que era pequeña, un físico «agradable a la vista» esbelta, rubia etc. Es lo que vende. No podía imaginarme ir a la consulta de una nutricionista y que la doctora estuviera obesa, sabiendo que era la mejor profesional de su ramo, sin pensar que pudiera tener una enfermedad grave, yo condicioné su aspecto físico a creerme sus consejos profesionales. ¿No es esto lo que realmente pasa todos los días? Nos quedamos siempre en la superficie.