Una gran parte de la clase política dice saber que «los españoles» no queremos otras elecciones. En mi opinión esta interpretación no es correcta. La mayoría de las ciudadanas y ciudadanos españoles queremos y necesitamos unas elecciones que rompan el bucle en el que estamos metidos desde 2015. Llevamos más de 4 años enredados en una madeja de gobiernos en funciones, pactos sin confirmar, tiras y aflojas y el Estado sin un gobierno que lo lidere. ¿Alguien se acuerda de lo urgente que era cambiar la Ley de Educación, o la Reforma Laboral, o garantizar el futuro de las pensiones, o€? Lo que no podemos aguantar es esta constante tomadura de pelo de mercadeo político para lograr unos votos en el congreso que permita el gobierno en «piloto automático» sin un plan de legislatura ni objetivos concretos. Lo que necesitamos es un gobierno que tenga el respaldo necesario y suficiente para marcar una serie de objetivos concretos que nos hagan avanzar. Un «proceso» para el Estado similar al «procés» catalán en el que queden claros los objetivos y todo el esfuerzo del gobierno y de las instituciones sean para lograrlos. Y nuestros objetivos deben ser conseguir un Estado que garantice el mayor bienestar social para sus ciudadanos, Que no enfrente a las diferentes Comunidades o Nacionalidades que integra. Que nos prepare para una posible amputación del territorio de manera que cause los menores males a ambas partes, que plantee como un objetivo primordial la comunicación a Europa por vía terrestre que no dependa de los nacionalismos vasco o catalán. Que nos hablen claro en la campaña electoral y haya unas nuevas elecciones en las que pueda surgir una verdadera mayoría o un gobierno de concentración nacional que nos permita salir del laberinto.