La continuidad de David Barral todavía está en «un punto verde», a falta de poco más de un mes para que expire el contrato del delantero gaditano con el Levante UD. Ayer todavía no se había convocado una reunión entre las dos partes y las posturas iniciales parecen lejanas.

La negociación se antoja complicada, ya que la posición de las dos partes es, de salida, distinta. Como ya informó este periódico, el Levante UD plantea a su máximo goleador de este año seguir, pero siempre que asuma un rol secundario, supeditado al fichaje de un delantero de nivel que sería la gran apuesta para la temporada y que partiría con la teórica etiqueta de titular. Una incorporación para la que el Levante UD está dispuesto a realizar un desembolso generoso en su ficha, viendo la recuperada calma financiera y el margen que da el juego limpio financiero de la Liga de Fútbol Profesional.

En ese escenario, Barral quedaría como un delantero revulsivo, destinado a agitar los encuentros en la segunda parte. Bajo esa premisa, la voluntad del club se traduciría en una oferta con contrato a la baja, en dinero y duración. Una consideración que no comparte el entorno del jugador, que cree que Barral ya ha demostrado que ha acabado contando con muchos minutos en sus dos temporadas como levantinista a pesar de no entrar en las primeras quinielas para el «once». Además, el jugador tiene como aval su excelente final de temporada, en el que ha sido el motor goleador que ha empujado al Levante UD a remontar puntos hasta la permanencia.

Unas estadísticas que, a sus 32 años y en el mejor momento de su carrera, también le empujan exponer sus propias condiciones y a escuchar ofertas de otros clubes. Desde su entorno se manejan varios seguimientos de equipos de Primera división, que habrían pujado con «ofertas en firme». Entre ellas, ya no estaría la del Málaga. Hace dos meses se llegó a decir que Barral había pactado su fichaje por el club de la Rosaleda por dos temporadas. Una pista que se esfumó, lo que abrió la vía a dos interpretaciones: que había utilizado al Málaga como elemento de presión para que el Levante UD, que no había movido ficha, reaccionara, pero la que se impone es la preferencia de los malacitanos en seguir contando con la cesión de Javi Guerra, procedente del Cardiff. Esta última novedad habría precipitado los mensajes de acercamiento del delantero hacia la entidad «granota» en las últimas semanas.

El destino de los otros delanteros, salvo Casadesús, también es incierto. Rafael Martins se encuentra de vacaciones en Brasil y tiene previsto regresar como uno más en julio. Las pretensiones de Kalu Uche son altas y está a la espera de un contrato en una liga emergente, como la MLS americana. Y Roger Martí volverá de su cesión en Valladolid para reivindicarse en la pretemporada.