El Levante UD persigue la consolidación de un núcleo de futbolistas valencianos e identificados con los valores del club para el siguiente proyecto. Ya tiene la base y ahora quiere reforzarla. El objetivo es repetir el armonioso ambiente que sirvió de base para conquistar sus mayores éxitos en los años recientes. El cogollo sobre el que sustenten el resto de hojas. Un grupo de jugadores que ejerzan el mando de la plantilla, al estilo de aquel colectivo liderado por Ballesteros, Juanfran e Iborra que fijaron al equipo en Primera División tras el último ascenso, en 2010. Ahora tiene nuevos cimientos y quiere fortalecerlos, con la aportación de nuevos jugadores.

Los defensas centrales David Navarro y Juanfran „que con 39 años negocia su renovación una temporada más„, los laterales Iván López y Toño y los centrocampistas Camarasa y Morales (madrileño de origen, pero considerado de la «casa») son el soporte sobre el que el Levante UD quiere apuntalar su siguiente proyecto.

Todos los mencionados han disfrutado de la confianza del entrenador. Con menor medida David Navarro, que perdió protagonismo en la recta final del campeonato en favor de Juanfran. Pero el club cuenta con ellos. Junto a los dos veteranos, la entidad que preside Quico Catalán quiere que los jóvenes valencianos vayan adquiriendo más protagonismo. El papel de Iván López y de Toño, ambos con contrato en vigor, debe ir en progresión. Ambos han firmado una temporada notable, después de la irrupción del segundo en el equipo en los últimos meses. El problema está en torno al primero. Las negociaciones para su renovación están paradas, pero el Levante UD va a intentar por todos los medios «atar» al lateral. El jugador tiene ofertas de otros clubes.

Mientras, el otro valenciano en liza es Pedro López, cuyo futuro se perfila lejos del Levante UD. Es el futbolista con el que menos ha contado Alcaraz desde su llegada. Apareció en el último partido, ante el Elche, a modo de despedida.

Mientras, desde el entorno del Levante UD han situado al portero de Torrent Vicente Guaita en la órbita del Levante UD para sumarse al proyecto. Pero el contacto ha sido muy superficial. Manolo Salvador preguntó hace semanas por su situación, pero recibió una negativa. No está en venta.

Lo que es seguro es que Alcaraz quiere que un grupo de futbolistas ganen peso en la plantilla. Entre ellos José Luis Morales, a quien el club va a mejorarle el contrato. El Levante UD y el futbolista negocian para subir su salario, ya que era uno de los jugadores peor pagados. El club ha ejecutado la claúsula de renovación de dos temporadas, pero quiere que su continuidad se firme hasta 2019. Tanto Lucas Alcaraz como Manolo Salvador lo consideran una pieza clave. A su espíritu de sacrificio, se une su dinamismo. Alcaraz lo ha alineado hasta en cinco posiciones distintas a lo largo de la temporada. Es interior zurdo, pero se desenvuelve con soltura por la derecha y, lo que es más importante, como lateral en cualquiera de las dos bandas. David Navarro y Camarasa también tienen el puesto garantizado en la plantilla de la próxima temporada.

Mientras, el Levante UD le ha dado un «ultimátum» a Pape Diop. El contrato del senegalés termina este verano y no ha respondido, todavía, a la oferta de renovación que el club le planteó en enero. El Olympiakos ofreció por él 1,5 millones la pasada campaña.