En los últimos años, una decena de inversores interesados en el Levante UD han desfilado por las dependencias del club. Ninguno pasó el filtro. Hasta el lunes. La primera oferta por el 71 % de las acciones del Levante UD, en poder de la Fundación «Cent Anys», con un respaldo financiero sólido ha aterrizado en Valencia desde el otro lado del Atlántico. La propuesta tiene cara y ojos, los de Robert Sarver, dueño de la franquicia Phoenix Suns, una de las más populares de la NBA.

Este banquero estadounidense está dispuesto a desembolsar un total de 56 millones de euros a cambio de la adquisición de la mayoría accionarial del Levante UD, al margen de sus bienes inmobiliarios. Desde el club se asegura que Sarver sólo está interesado en la marca deportiva de la entidad y en sus posibilidades de crecimiento gracias al nuevo reparto de los derechos de televisión. De hecho, el magnate renuncia en su oferta a la propiedad de los dos activos urbanísticos del club: el estadio Ciutat de València y la Ciudad Deportiva de Buñol. Sarver prefiere que ambos queden en manos de la Fundación, aunque todavía se tiene que estudiar si esa opción es viable legalmente.

En la reunión que el consejo de administración del club y la comisión ejecutiva de la Fundación celebraron el lunes, el presidente levantinista, Quico Catalán, desgranó las claves de la propuesta de Sarver, recibida en las últimas semanas de la mano de la consultora KPMG „que ya intervino en la reciente venta del Valencia CF„.

En este sentido, la intención del empresario estadounidense pasa por comprar las acciones de la Fundación a cambio de liquidar su deuda con la entidad financiera Mare Nostrum, poco más de 4,2 millones de euros. Esto generó debate entre los dirigentes azulgrana. Una parte cree que habría que tasar el valor actual de las acciones del Levante UD y decidir cómo gestionar una hipotética plusvalía, en el caso de que los títulos se acaben vendiendo por un precio superior al de la deuda.

En segundo lugar, Sarver pretende poner a cero el contador de deuda del club mediante el pago de 32 millones de euros. El resto de la inversión prevista, entre 19 y 20 millones, irían destinados a reforzar el equipo y remodelar el estadio. Sin embargo, queda por aclarar mediante qué tipo de obras y con qué presupuesto. Del proyecto deportivo, por contra, los dirigentes granotas subrayan que no se conoce nada relevante.

Sarver, acompañado del vicepresidente de los Phoenix Suns, Andy Kohlberg, visitó el pasado 25 de mayo las instalaciones del Ciutat de València, donde se entrevistó con el presidente Quico Catalán, al que había telefoneado durante el día anterior.

El atractivo de la Liga

El banquero de Arizona sopesa desde hace meses llevar a cabo una fuerte inversión en el fútbol español. Aconsejado por los dirigentes de la Liga de Fútbol Profesional y conocedor de que los futuros derechos de televisión revalorizarán el campeonato, Sarver busca su hueco en el deporte rey en Europa. Desde la llegada de Javier Tebas a su presidencia, la LFP se ha volcado en la internacionalización de la competición y el rastreo de inversores foráneos. En EE UU, la LFP y la NBA emplean como enlace un patrocinador común, el banco BBVA.