Usted sabe lo que significa llevar el brazalete. Ahora que se van Juanfran y David Navarro, ¿es tan importante la figura del capitán dentro de la caseta?
En mi año era todo muy fácil. Nosotros éramos cuatro capitanes: Ballesteros, Xisco Nadal, Juanfran y yo. Y sí, claro que es importante, porque el capitán es el primero que da ejemplo. Pero era fácil porque había muy buena gente y nadie daba problemas. No había que ponerse duro por problemas de indisciplina ni nada por el estilo. Esos años fue todo muy fácil en ese sentido.
¿Competir en Segunda se hará muy duro después de seis años en Primera?
Hay que ser constantes e ir partido a partido. Es una competición muy dura, quizás de las más duras. Hay mucha igualdad. Cualquier equipo te sorprende y cualquiera puede subir. Nadie se esperaba que subiera el Alavés o el Leganés u Osasuna, que no tenía uno de los presupuestos más elevados. Hay mucha competencia y la cuestión es que cuando vayan las cosas mal no volverse loco. Es una competición muy física y hay que estar mentalizado y muy bien preparado.
¿Conoce a Tito?
De la AFE, del Alicante... Me ha hablado de él Rubiales y alguna vez nos hemos saludado.
¿Si le llama para volver al Levante UD le diría que sí?
(Ríe). Si me llama, seguramente le diría que sí.
¿Ha dejado la puerta abierta a un posible regreso al fútbol español?
He pasado un año muy bueno aquí en el Rapid de Bucarest, un club histórico de Rumanía que había bajado a Segunda. Este año hemos quedado primeros y hemos subido. Me han ofrecido seguir y me lo estoy pensando. Pero si me dicen algo del Levante UD me lo pensaría, porque ahí he estado muy a gusto, mi mujer es valenciana y he pasado unos años muy bonitos en el Levante UD.
