Una lesión muscular en el tramo final de la pretemporada le relegó al banquillo en las primeras cinco jornadas de Liga, en las que Álex Remiro fue titular. Sin embargo, tras su reaparición ante el Sevilla Atlético, Raúl Fernández (Bilbao, 28 años) se ha adueñado de la portería granota.

Nueve partidos después, el guardameta vasco es el «Zamora» de la competición, con seis goles encajados y un puñado de intervenciones trascendentales. Además, con el del pasado sábado, acumula cinco encuentros con la portería a cero.

El rendimiento de Raúl es uno de los pilares sobre los que se asienta la solidez azulgrana. El conjunto de Muñiz es el menos goleado de la categoría, con una decena de tantos en contra en 14 jornadas. Sólo el Reus es capaz de aguanta el tirón, también con diez goles recibidos.

Con Raúl bajo palos, el Levante UD ha logrado cerrar la portería cinco veces en las últimas nueve jornadas. Las víctimas del muro azulgrana han sido el Sevilla Atlético, el Elche, el Mirandés, el Reus y el Cádiz. El papel de Raúl Fernández, especialmente en los últimos dos partidos, fue determinante gracias a sus paradas salvadoras. El sábado rechazó con los guantes un potente disparo de Ortuño desde dentro del área y ante el Reus evitó el empate al enviar a córner un cabezazo de Mayor en el área pequeña. Su punto débil se ha visto en algunos centros bombeados al área, sobre todo a balón parado, en los que el Levante UD ha encajado varios goles. Un problema que Muñiz ha señalado públicamente.

Con todo ello, la media de goles encajados por Raúl es 0,66 por encuentro, un porcentaje mejor que el de Juan Carlos, portero del Oviedo (0,78), segundo «Zamora».

Raúl, que acaba de ser padre de una niña, firmó este verano por el Levante UD hasta junio de 2018. Lo hizo después de quedar libre al terminar su contrato con el Mirandés. También ha jugado en el Athletic y el Racing.