Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La gloria y el futuro del Valencia BCy del Llevant

La gloria y el futuro del Valencia BCy del Llevant

Una Copa y tres Eurocups lucían en las vitrinas de la Fonteta hasta ayer. Era el bagaje resumidísimo de 30 años de historia. Luego está todo lo que no aparece en el palmarés de cualquier club. Fundamentalmente las sensaciones y sentimientos que ha sido capaz de transmitir a miles de persones durante décadas. Ahora se suma también una Liga, conquistada con todo el simbolismo de ser la guinda del 30 aniversario del club impulsado por Fernando y Juan Roig y de haberse logrado frente al que toda Europa consideraba el mejor equipo del continente. Valencia Basket venía de perder por un suspiro frente a ese mismo Madrid la Copa y de caer ante Unicaja en la Eurocup, tras dilapidar una ventaja considerable. Esta vez la escuadra taronja no falló en el partido más importante de su historia y ante su hinchada.

En septiembre de 2009 el camarada García Nieves y servidor presentaban el primer volumen de la mastodóntica «Historia del Llevant UD». Unos meses después de aquel acto en el Ateneu Marítim, la victoria (3-1) frente al CD Castellón (¿no han leído aún la crónica del enésimo fracaso orellut, firmada por Enrique Ballester? Búsquenla y léanla, ¿a qué esperan?) ponía la guinda a la «gesta del segle» y confirmaba el insospechado retorno a Primera del Llevant pilotado por Quico Catalán y Luis García.

He tenido el placer de coordinar la edición de Esperit taronja, de Joan Carles Martí y Jorge Salas. El libro ha sido un hermoso prólogo para la mejor temporada de esa historia. Y me anima a pensar que existe una relación directa entre dotar a un club de obras librescas que ofrezcan una perspectiva histórica y alcanzar los éxitos que coronan esa trayectoria. Tal vez es la perspectiva lo que permite a los jugadores, que en definitiva son los que hacen posibles, con sus pequeños detalles, las hazañas colectivas, absorver y catalizar tota la energia que es capaz de generar la ilusión de miles de personas que persiguieron un sueño a lo largo de los años.

Más allá de toda esta poética, tanto para Valencia Basket como para el Llevant UD, clubes que han cimentado sobre valores sus éxitos, tras unos días de emociones y alegría desbordada, les ha llegado el momento de consolidarse en la élite. Valencia BC, a punto de estrenar l´Alqueria del Bàsquet, que será la mejor escuela de formación de Europa, puede y debe demostrar que esta Liga es el inicio de un club renovado, ambicioso y capaz de ganarlo todo, y no un colofón.

Por su parte, el Llevant debe ser capaz, este verano, de fijar los pilares que le permitan hacerse fuerte en Primera, que consoliden sus secciones deportivas, que definan su política deportiva de cantera, que arraiguen los valores en el funcionamiento interno y que siembren, en definitiva, los grandes logros que aún están por venir.

Muchos desconocen que en los años 80 el Llevant fue el club pionero en usar la referencia taronja como símbolo de valencianidad. Hubo incluso un intento, afortunadamente abortado, de cambiar el nombre del club y que pasase a llamarse Naranja CF. De todo aquello quedó un segundo uniforme, íntegramente taronja, que llegó a utilizarse puntualmente.

En resumen, tanto Valencia Basket como Llevant, tras una historia de sacrificios y esfuerzos denodados, tienen ante sí la posibilidad de asentarse estructuralmente y de convertirse en un orgullo para todos los valencianos. Más aún de lo que ya lo son. Felicitats, campions!

Compartir el artículo

stats