En la mayoría de los casos, los trece entrenadores que han apostado por dejar la escuela del Levante UD por su cuenta, su decisión se apoya en que, según indican, la entidad los había reubicado en equipos inferiores o les había asignado otras funciones distintas a la de entrenador.

En Fútbol 8 existen varios casos en los que el primer entrenador del equipo, después de una temporada peleando por los primeros puestos de la clasificación, se les ha propuesto pasar a ser delegado de equipo. «Era primer entrenador y me ofrecían pasar a ser delegado. Les dije que no me motivaba. Después de la temporada que habíamos hecho no era justo», apunta uno de los extécnicos de la escuela.

Las mejoras llegan ahora

Por otro lado, el club va a mejorar esta próxima temporada las condiciones salariales de los empleados de la cantera del club. En esta última campaña, con Tito al frente de la dirección deportivo, se pasó a regularizar todos los pagos a los trabajadores, algo que no se había hecho hasta entonces. Los entrenadores de Fútbol 8 percibían por cada equipo que dirigían un montante de 370 euros brutos, unos 330 netos. En el caso de Fútbol 11, la cifra aumentaba a los 450 euros brutos, unos 410 netos. Por contra, en el caso de los delegados de equipo, encargados de llevar las fichas y un apoyo del cuerpo técnico, la retribución caía a la mitad en cada caso: 185 y 225 euros brutos, respectivamente.

Varios de los técnicos que ahora se marchan y firmaron la carta de queja consideran que los nuevos entrenadores se beneficiarán de su acción de protesta en 2016.